EL PATIO DE MI CASA

Todos avanzan en rueda, menos quien ganó hacer de reina —o de demonio, si es varón— que entrará después.

El patio de mi casa es particular,
si llueve se moja como los demás.
Agáchense y vuélvanse a agachar
las niñas bonitas se vuelven a agachar.

Levántate y vuelve a levantar,
que los agachaditos se quedan sin bailar.

Si vienes aquí aprende a bailar.
Si vienes aquí aprende a cantar.
Baila y canta el corro como los demás.

Levántate y vuelve a levantar,
Que los levantaditos si saben bailar.

Chocolate, molinillo, a estirar a estirar
que, ________________ va a pasar.

“la reina” (si es niña) o “el demonio” (si es niño)

Aquí estiran la rueda lo más que puedan separarse y sin desunir las manos de quienes estén a los lados.

Entra “la reina” o “el demonio”, brincando en un pie y avanzando en sentido contrario.

—Estoy coja(o) de un pie,
no puedo caminar,
pues yo soy cojita(o)
desde chiquitita(o)
pero si lo soy
lo soy de “mentiritas” (“engañaditos”).


Sólo dejará caer el otro pie al terminar la canción, pasando así el turno de reina o demonio a quien esté enfrente.