LIX. FLUJO DE INFORMACIÓN

EL EXTENSO uso de computadoras ha planteado nuevos problemas legales, algunos de nivel internacional. Uno de los más característicos se refiere a la transferencia de datos de un país a otro. Excepto en tiempos de guerra, fría o caliente, siempre ha habido un flujo liberal de información científica entre países, pero ha estado naturalmente limitado por la imposibilidad física de transportar y acumular grandes cantidades de información. Esta situación ha cambiado radicalmente con el uso de computadoras para almacenar y manejar nutridos bancos de datos y ya hay muchos ejemplos en los que son compartidos entre distintos países.

El problema legal aparece en relación a los bancos de datos usados por instituciones privadas —como bancos, compañías de seguros, agencias de detectives, etc.— que acumulan información sobre personas. Cada país, por lo menos los más desarrollados, tiene leyes para controlar el manejo de tales bancos de datos de manera que no se infrinjan las garantías individuales en cuanto a discreción y uso específico de la información personal.

En la República Federal Alemana, por ejemplo, la ley obliga a destruir toda la información con más de cinco años de antigüedad; se evita así que se use información obsoleta sobre alguna persona y se obliga a la empresa a obtener una nueva aprobación explícita por parte del sujeto que da los datos. La diferencia en legislación al respecto, de un país a otro, ya ha provocado dificultades, Mientras los gobiernos comienzan a tener consultas en la materia, algunas compañías han mudado sus bancos de datos a países con legislación más liberal. Se dio el caso de un consorcio detectivesco que ha mudado su banco de datos a Luxemburgo, donde lo puede consultar directamente por teléfono desde cualquier país de Europa Occidental. Queda por otro lado el peligro de la exportación de información gubernamental que, sin ser secreta, requiere de cierto grado de discreción, el cual se garantizaba tradicionalmente por la mera dificultad física de manejar numerosos y pesados volúmenes de archivo.