Sí lo hay. ¿Quieres verlo?

Perfora una tarjeta con una aguja.

A través del agujero, observa un foco.

Verás aparecer formas curiosas.

Esto no es una ilusión óptica.

Estas formas son pequeñas partículas del polvo que tienes en tus ojos, que proyectan sombras sobre tu retina.

Como son más pesadas que el líquido de tu ojo, flotan y se mueven hacia abajo con cada parpadeo.

Si inclinas tu cabeza hacia un costado, las particulas se cambian hacia esa esquina de tu ojo, lo que comprueba que se mueven por efecto de la fuerza de gravedad.