La gallina de mentiras


Buenos días tenga usted, dispensando su merced. La pregunta es la razón, que me diga qué horas son. Para saludar corriente, yo, que soy tan dependiente, traigo ganas de tratar. Comienzo con las mujeres, las que manejan cocina:

Que si me compra una gallina, que ayer tarde se me salió del huacal y agarró el camino real.
Corriendo me fui tras ella, ya no la pude alcanzar.
Corrió pa' entre los magueyes y en un bosque de magueyes se peleó con unos bueyes, a toditos los picoteó.
Hoy me la reclama el dueño, yo la busco con empeño por todito alrededor, no es de ponderación. Pone doscientos huevos cada ocho días, aparte de los nidales que pone entre los nopales.
Se fue para Los Robles, se comió ocho puercos gordos, la purita manteca. Ahora todos los de Lagos lo anduvieron platicando: "que la vieron ir pasando con un coyote en el pico, que de la panza lo llevaba, que nomás abría el hocico".

¿Te gustó este cuento de mentiras?

¿No te gustaría escribir un cuento sobre un pollo? Puedes anotar tus mentiras en algún cuaderno.

Aquí verás lo que hace un pollo travieso.

Ahora, si tú quieres, cuenta a tus compañeros el cuento que inventaste.