¿A quién le toca?

Es la hora de jugar, así que Doña Bernarda te invita a formar una rueda, cantar y correr. Primero hay que elegir un juego y después, escoger a quién le toca corretear a sus compañeros o quedarse dentro del círculo, ¿alguien se anima?

Si nadie se ofrece, uno de los niños puede señalar a cada uno de los jugadores, mientras recita el siguiente verso:

Una ratona
de tela canela
espanta a la gata
de vidrio vidrión;
cuenta las horas
que ya mero son,
que de la placita
de la Encarnación
ya salga la chata
comiendo melón.

 

El jugador señalado al decir melón, es el escogido para quedarse dentro o fuera de la rueda.