Coplas de despecho

 

 

Agua de piña,
agua de coco;
si no me quieres,
me importa poco.

Del cielo cayó un pañuelo
oliendo a puro tabaco;
¡piensas que te estoy queriendo,
costillas de perro flaco!

 

En la azotea de mi casa
tengo unos libros mojados;
me gustan los hombres serios
y no los enamorados.

En la puerta de mi casa
tengo una mata de moras;
¿cómo quieres que te quiera
si de todas te enamoras?

 

Si me desprecias por morena,
yo no desprecio el color.
Entre los güeros y morenos
siempre somos lo mejor.

Del cielo cayó un perico
con un pañuelo en el pico;
yo sí te quiero,
pero no te lo platico.