Moronduyo
(diálogo y objeto)


Todos los jugadores toman un puño de semillas de calabaza y forman parejas. Enseguida, un niño de la primera pareja muestra a su compañero el puño cerrado y dice:

¡Juego moronduyo!

Si su pareja acepta el juego, contesta:

¡Abre el puño!

Entonces, el retador lo abre y muestra las semillas que tienen por unos segundos, mientras dice:

¿Sobre cuántas?

Luego de cerrar el puño, su compañero debe adivinar la cantidad exacta de semillas. Si adivina, gana y se queda con las semillas de su contrario. Pero si pierde, paga una cantidad igual de semillas a las de su retador.




 


 

Así, las demás parejas hacen lo mismo. Después, se forman nuevas parejas con los ganadores de cada pareja anterior y juegan igual.

Gana quien se quede al último con las semillas de todos.