Hablar mientras

se escribe

La importancia de la interacción oral entre compañeros para producir mejores textos

desde el colectivo docente

Actividades

  1. Inicien la actividad compartiendo acerca de la forma en que sus alumnos producen textos. ¿Les gusta escribir? ¿Lo hacen con facilidad y se sienten a gusto escribiendo? Si presentan dificultades, ¿cuáles son éstas?
  2. Realicen una recapitulación de lo revisado en el Taller General de Actualización de este ciclo escolar y destaquen las estrategias que les parecieron más significativas para facilitar la producción de textos en el aula.

Recuperen los acuerdos para continuar su actualización a los que llegaron como resultado de la tercera sesión del taller.

  1. Revisen los propósitos de las actividades, el contenido general del cuaderno, así como la estructura que éstos presentan.
  2. Lean el apartado que se refiere a las recomendaciones y coméntenlas entre sí.
  3. Dense un tiempo para reflexionar acerca de lo que sucede en su aula. En particular hagan un recuento de qué tanto uso hacen sus alumnos de la expresión oral a la hora de producir textos.
  4. Consideren si sus alumnos y alumnas expresan y comparten entre sí sus ideas para la planeación de sus escritos, si hablan para desarrollar el escrito, para compartir sus temas, para revisar y corregir los borradores, y para realizar acuerdos para la publicación.
  5. Comenten, ¿qué tanto favorecen ustedes la interacción oral mientras sus alumnos producen textos? O bien, ¿son de los que piensan que no se debe hablar mientras se escribe?
  6. Argumenten sus comentarios acerca del punto anterior.
  7. Lean los siguientes recuadros:

En definitiva, la oralidad constituye la base comunicativa previa desde la que el aprendiz desarrolla lo escrito. El diálogo es el instrumento más eficaz para regular los procesos de composición del aprendiz y para desplegar los procesos de análisis, reflexión y valoración que requiere. Cuando el alumno habla de lo que está escribiendo, verbaliza su pensamiento interno y permite que otras personas, compañeros y docentes, le ayuden a conformarlo, que le hagan preguntas que le animen a ampliarlo, o que le muestren formas alternativas de pensamiento que no conocía.

Cassany, Daniel, Construir la escritura.

Hablar y escuchar, conversar, interactuar, es el principal instrumento de aprendizaje. La interrelación entre los aprendices y el docente se realiza fundamentalmente con el habla, de modo que de ningún modo debe prohibirse o reprimirse el habla sobre composición o sobre el escrito. Los coautores o los compañeros pueden intercambiar ideas sobre el texto, su proceso de composición, su planificación, su textualización, etc. ¿El silencio favorece el aprendizaje de la escritura? ¡No! Dialogar, conversar, escuchar son formas de captar ideas, de desarrollarlas, de interpretarlas, de prepararlas para la escritura. El habla coloquial no contamina la escritura: chicos y chicas discriminan bien lo dicho de lo escrito si se les ofrecen contextos reales de escritura, con destinatarios plausibles.

Cassany, Daniel, Decálogo didáctico para la enseñanza de la composición.

  1. Analicen las ventajas que tiene la expresión oral en su relación con la producción de textos. Hagan una lista con ellas. ¿En qué otros momentos y situaciones de escritura convendría emplear el diálogo oral?
  2. Compartan sus ideas acerca de cómo pueden aprovechar la expresión oral para favorecer la producción de textos.

Algunas estrategias pueden ser:

  • Organizar a los alumnos de diversas formas: ejemplo en parejas, tríos, cuartetos, etcétera.
  • Considerar las características tanto de los alumnos como de las alumnas para realizar la integración de los subgrupos; por ejemplo, es conveniente distribuir estratégicamente a aquellos que puedan ser líderes de un equipo, así como también a los que necesiten más ayuda.
  • Programar los momentos en que, como docentes, es conveniente interactuar con un equipo, una pareja e incluso entrevistar a algunos alumnos para favorecer el proceso de escribir.
  • Considerar el momento del proceso de la producción escrita en que se dará esa interacción. También debe tomarse en cuenta el propósito de la interacción para establecer modalidades diferentes. Por ejemplo, promover una lluvia de ideas a fin de generar temas para escribir, una discusión en equipo sobre la mejor manera de organizar las ideas, una entrevista o una conversación en parejas para promover la revisión, etcétera.
  1. Integren sus ideas para la promoción del intercambio oral a la planeación del Taller de escritores, a fin de considerarlas para cualquiera de sus etapas.