Ventajas

Promueve la participación del estudiante al monitorear y evaluar su propio aprendizaje.

Requiere que los estudiantes asuman la responsabilidad de sus aprendizajes.

Provee la oportunidad de conocer actitudes de los estudiantes. Provee información valiosa sobre el proceso de enseñanza–aprendizaje. Los maestros pueden examinar sus destrezas.

Se puede adaptar a diversas necesidades, intereses y habilidades de cada estudiante.

Se puede utilizar en todos los niveles escolares. Promueve la autoevaluación y control del aprendizaje. Selecciona alumnos hacia programas especiales.

Certifica la competencia del alumno, basando la evaluación en trabajos más auténticos.

Permite una visión más amplia y profunda de lo que el alumno sabe y puede hacer.

Permite tener una alternativa para reportar calificaciones y exámenes estandarizados.

Provee una estructura de larga duración. Transfiere la responsabilidad de demostrar la comprensión de conceptos hacia el alumno.

López Frías, Blanca Silvia y Elsa María Hinojosa Kleen.“Alternativas y nuevos desarrollos” en Evaluación del aprendizaje. México:
Trillas-itesm-ilce, 1990, pp. 87-136.