La construcción de una nueva ruta estratégica de formación continua del centro educativo para la atención de la diversidad
Con los insumos construidos a lo largo del taller, elaboren su Ruta estratégica de formación continua del centro educativo para la atención de la diversidad. Con la participación de todos, definan su estructura y compartan responsabilidades para su elaboración y puesta en práctica durante el ciclo escolar.
Algunos compañeros compartan al colectivo el producto de su “Actividad entre sesiones” (poema, cuento, acróstico, etcétera).
La temática, como seguramente pudieron constatar, no se agota en este espacio de formación. Con la intención de agregar algunos aspectos importantes para continuar la reflexión, les sugerimos tomar en cuenta las siguientes preguntas:
- ¿Por qué es importante partir de los conocimientos previos de los alumnos, especialmente los que tienen que ver con su cultura y con su lengua?
- ¿Cómo se puede atender la diversidad lingüística en el aula de educación primaria para lograr niveles de bilingüismo equilibrado?
- ¿Qué importancia tiene el proceso de reflexión sobre la propia práctica docente en la implementación del enfoque de la educación intercultural?
- ¿Por qué es importante planear nuestro trabajo en el aula, en el proceso de implementación del enfoque citado?
- ¿Cómo se relaciona el enfoque de la educación intercultural con la atención a las necesidades educativas especiales, asociadas o no a una discapacidad?
- ¿De qué nos sirve el proyecto escolar en este proceso?
- ¿Cómo podemos incluir en el proyecto escolar algunos aspectos que nos permitan implementar el enfoque intercultural en la escuela?
A manera de cierre, alguien del grupo lea en voz alta el siguiente texto:
Universalizar la educación Universalizar la educación significa poner el hecho humano –lingüístico, racional, artístico...– por encima de sus modismos; valorarlo en su conjunto antes de comenzar a resaltar sus peculiaridades locales; y sobre todo no excluir a nadie a priori del proceso educativo que lo potencia y desarrolla. Durante siglos, la enseñanza ha servido para discriminar a unos grupos humanos frente a otros: a los hombres frente a las mujeres, a los pudientes frente a los menesterosos, a los citadinos frente a los campesinos, a los clérigos frente a los guerreros, a los burgueses frente a los obreros, a los “civilizados” frente a los “salvajes”, a los “listos” frente a los “tontos”, a las castas superiores frente y contra las inferiores. Universalizar la educación consiste en acabar con tales manejos discriminadores...
Savater, Fernando. El valor de educar.
México: Ariel, 1997, pp. 153-154.