INTRODUCCI�N
H
ACE
aproximadamente dos a�os la agencia Notimex tuvo la gentileza de invitarme a colaborar con ella escribiendo notas y ensayos ocasionales de divulgaci�n sobre temas cient�ficos. Tales escritos ser�an publicados en algunos diarios de la capital y de la provincia de nuestro M�xico, as� como de varios otros pa�ses latinoamericanos. Conociendo la necesidad urgente de interesar e informar al p�blico mexicano y de toda nuestra Am�rica Latina sobre la naturaleza, los alcances y los l�mites de la ciencia, as� como sobre otros muchos aspectos del trabajo cient�fico en general, e interesado y comprometido desde hace tiempo con la divulgaci�n cient�fica, acept� de inmediato. Bajo la gu�a respetuosa y lejana, pero no por ello menos firme, primero de Jorge Villoro y de Alejandro Rossi, y despu�s de este �ltimo, aprend� algunos de los secretos de la escritura period�stica, especialmente el m�s dif�cil de todos: la brevedad. Que no aprovech� todas sus valiosas lecciones es algo que el amable lector y yo lamentamos pero que exime a mis generosos tutores de todas las torpezas gramaticales y de estilo de estas p�ginas, que junto con su contenido conceptual, son de mi �nica responsabilidad.Aunque escritos para publicaciones de relevancia ef�mera (no mayor de 24 horas) los art�culos reunidos en este volumen poseen mayor vigencia temporal, no por su forma sino por el tema al que se refieren y por el p�blico a quien est�n dirigidos. En efecto, una de las m�ximas prioridades de los pa�ses del Tercer Mundo, transformada en urgente por la profunda crisis econ�mica que nos afecta hoy a todos, es la incorporaci�n de la ciencia no s�lo a nuestros elementos productivos y a nuestra manera de pensar, sino a nuestra conciencia y a nuestra cultura. No es que sin ciencia el futuro de los pa�ses del Tercer Mundo sea incierto: es que sin ciencia no tenemos futuro. Tal es la raz�n por la que he decidido volver a publicar mis notas period�sticas sobre el tema, esta vez en forma de libro. Si de alguna manera estas breves p�ginas, unas sobre temas actuales, otras menos sujetas a nuestro tiempo, pero todas relevantes a los problemas de hoy y de ma�ana, de M�xico y de Am�rica Latina, contribuyen a disminuir la distancia entre la ciencia y el hombre latinoamericano contempor�neo, habr�n cumplido con su objetivo.