CAPÍTULO XXXIX |
1.-Aquí brevemente se dice de todo lo susodicho, de las
calidades, y de condiciones de todos los signos de cada día; cuáles
son bien afortunados y cuáles son infelices, ya se ha dicho largamente
atrás, y se ha replicado muchas veces que todos los signos hacen
y cuentan cada día, los cuales se andan mudando de unos lugares
a otros de sus números, y son todos los mismos; que cada uno de
aquéllos tiene principio cada vez, llevando tras sí a los
otros, alguna vez es bien afortunado, y alguna vez es mal aventurado y
alguna vez es indiferente, conforme a sus números; ya esto está
dicho. 4. Por tanto, aquí decimos sumariamente lo que resta de
decir y hacer mención de todo lo susodicho, por no dar hastío
a los lectores con palabras demasiadas y superfluas, y más porque
en esto no estamos estimados por importunos, de tornar a decir lo que
está ya dicho, porque poniendo comparación que así
como si fuese comida muy sabrosa, no más ni menos la plática
o razonamiento pierde su sabor cuando se repite muchas veces una cosa,
y en esto ya se dijo todo, muy delicada y suavemente; así lo
que era blando y caliente, y sabroso, y suave, y gracioso, y donoso. 4 Bustamante suprimió este capítulo en su edición, por considerarlo inútil. Y el mismo criterio siguió Jourdanet en su traducción francesa. |