6. El derecho a la educaci�n

Corresponde a la sesi�n de GA 5.6 AL ALCANCE DE TODOS

El derecho a la educaci�n es una de las principales conquistas del pueblo mexicano, pues, este derecho no siempre lo han gozado todos los mexicanos. Para que se comprenda mejor este tema referiremos primero la educaci�n de los antiguos mexicanos. En el per�odo prehisp�nico, aunque todos ten�an derecho a recibir una instrucci�n, no a todos se les impart�a de la misma forma porque exist�an dos instituciones dedicadas a esta importante misi�n, �stas eran: el tepochcalli y el calmecac. Al primero asist�an los hijos de agricultores, artesanos y comerciantes; y, al segundo, los hijos de guerreros y sacerdotes. Con la llegada de los espa�oles esta forma de ense�anza fue alterada.

Desde el principio de la �poca colonial la ense�anza estuvo en manos de la Iglesia, que fund� escuelas elementales y superiores; a las escuelas elementales asist�an los ind�genas, all� se les instru�a en la cuesti�n religiosa y se les ense�aba algunos oficios; a las escuelas superiores, solamente ten�an acceso los descendientes de espa�oles. Esta situaci�n prevalec�a cuando estall� el movimiento independentista, el que afortunadamente rompi� con los privilegios de la clase en el poder, modific�ndose poco tiempo despu�s el sistema de ense�anza.

Es hasta 1833, con Valent�n G�mez Far�as, como vicepresidente de la Rep�blica, cuando se inici� un programa de ense�anza nacional y se cre� la Direcci�n General de Instrucci�n P�blica, adem�s de establecerse inmediatamente despu�s escuelas primarias y normales, y la libertad de ense�anza.

En 1867, Benito Ju�rez promulg� la Ley Org�nica de Instrucci�n P�blica, que establec�a a la educaci�n como obligatoria, gratuita y laica. Este hecho fue sumamente importante, a tal grado, que estas bases constituyen en la actualidad las principales caracter�sticas de la educaci�n en M�xico y fueron la base para la elaboraci�n del art�culo tercero constitucional que en esencia dice:

Todos los mexicanos tienen derecho a la educaci�n y �sta, en los niveles de primaria y secundaria, es obligatoria. La educaci�n impartida por el Estado pretende, entre otras cosas, fomentar el amor a la patria y desarrollar todo el potencial de los individuos. Adem�s, debe mantenerse al margen de cualquier doctrina religiosa y luchar contra la ignorancia; debe ser democr�tica y buscar el mejoramiento econ�mico, social y cultural de todo el pueblo. En este mismo art�culo, la Constituci�n Pol�tica de los Estados Unidos Mexicanos declara: "Toda la educaci�n que el Estado imparta ser� gratuita", esto ser� en escuelas oficiales. Otra caracter�stica de la educaci�n p�blica en M�xico, de acuerdo con el art�culo tercero, es que debe ser laica, lo que quiere decir que la educaci�n debe ser ajena a toda doctrina religiosa.

En el mismo art�culo tambi�n se establece que mientras el Estado tiene la obligaci�n de impartir educaci�n, los mexicanos tienen el deber de recibirla y en el art�culo treinta y uno constitucional se se�ala como una obligaci�n de los mexicanos, hacer que sus hijos o pupilos concurran a las escuelas p�blicas o privadas, para obtener la educaci�n primaria y secundaria.

Con base en todo lo expuesto anteriormente, debe entenderse que todos los mexicanos tenemos derecho a recibir una educaci�n b�sica, cuando menos, y que es obligaci�n del Estado impartirla, por lo que los habitantes de este pa�s debemos ejercer este derecho.