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Haz un reloj de arena con dos frascos de vidrio y sus respectivas tapas metálicas de rosca:
- Pega las dos tapas de metal
como se observa en el primer dibujo.
- Perfora las tapas para que queden
como en el dibujo 2 o el 3.
- Pon arena en un frasco de vidrio
hasta que esté lleno a la mitad. Atorníllale la tapa
y atornilla el otro frasco encima.
- Mira tu reloj y calcula el tiempo
que tarda en pasar la arena del frasco de arriba al frasco de abajo.
Agrega o saca arena hasta que puedas dividir el tiempo entre doce.
Así sabrás cuánto dura "una hora" de
tu reloj.
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