Localizados en: Canadá, Corea, Estados Unidos, México, China, Mongolia, Rumania y Rusia.

Carnívoros bípedos, de longitudes entre 2 y 6 metros. Cabeza grande, cráneo fuerte con poderosos músculos que lo articulaban a las mandíbulas para dar fuertes tarascadas. Su principal característica era una enorme garra en forma de hoz que en algunos casos llegó a alcanzar hasta los 35 centímetros de largo, en el segundo dedo del pie. Los dientes curvos, en forma de sierra, eran eficaces para cortar la carne de los animales que le servían de alimento. De brazos y patas largos, lo mismo que la cola; los huesos cerca de la cintura eran flexibles y no tenían una varilla ósea, pero las vértebras caudales distales presentan una apófisis en forma de varilla gracias a la que se articulaban entre sí, confiriéndole cierta rigidez a la cola, aproximadamente desde la mitad hasta la punta. Le servía como un estabilizador para girar o virar, sobre todo cuando corría a altas velocidades. Algunos paleontólogos creen que fueron los dinosaurios depredadores más eficaces que existieron.

Velociraptor mongoliensis