En esa misma carta, Escandón participaba el propósito de "hacer varias poblaciones en los parajes que se hallaren más acomodados". Esto habría de beneficiar a soldados y vecinos carentes de tierras; tendrían derechos de pobladores; les mercedarían tierras, en común o en particular; no pagarían derechos ni obtenciones. Además de ordenar que por bando convocara a las familias, envió comisionados a cada pueblo a reclutarlas, con mandamiento expreso a los alcaldes mayores a que auxiliaran a éstos en todo. En los primeros días de diciembre de 1748, a un año y diez meses de su primera entrada de inspección, volvió Escandón a salir de Querétaro, "con la idea de comenzar las fundaciones del Nuevo Santander".
No compartimos la opinión de la generalidad de los historiadores en el sentido de que lo haya hecho acompañado de "un gran convoy" o de "una enorme caravana" de varios miles de personas. De los pobladores de Nuevo Santander apenas si se mencionan algunos procedentes de Querétaro. Los grupos que integraron el pie veterano de las villas fueron llegando gradualmente de diversos rumbos. Las veintidós poblaciones fundadas por Escandón no surgieron de golpe. Se requirieron siete años para su establecimiento. Las informaciones hechas por Tienda de Cuervo en 1757 y que aparecen en el Estado general..., publicado en 1929 por el Archivo General de la Nación, dan idea clara y pormenorizada del movimiento migratorio.