19. Su "confesión", recogida por Fabbroni, Lorenzi Medicis Vita, vol.
II,
p. 168, contiene una interesante versión de la trama de esta
intriga. No seríamos justos con la memoria del papa Sixto si no dijéramos que
Montesecco lo descarga de toda culpa en el designio de asesinar al Médicis.
Lo único que se proponía era arruinarlo.