Estructura de las estrategias didácticas

as estrategias didácticas están organizadas para desarrollarse en tres momentos:

En el apartado Desde el colectivo docente se plantean actividades que conducen a los participantes a vivenciar, reflexionar y analizar distintas situaciones comunicativas con el propósito de que realicen las modificaciones que requieren las actividades propuestas para su aplicación en el aula.

Con las actividades de este apartado, se espera que los participantes reflexionen acerca de las habilidades necesarias para que los alumnos expresen oralmente sentimientos, dudas y opiniones. Se pretende también que reconozcan las condiciones básicas para dar y obtener información, organicen sus ideas, expongan oralmente manteniendo el interés de la audiencia y promuevan en sus alumnos una adecuada participación por turnos, tanto en lengua materna como segunda lengua.

Admitimos que en los contextos escolares del medio indígena existe una gran diversidad de situaciones lingüísticas, desde monolingües en lengua indígena con un manejo elemental del español, bilingües en lengua indígena y español con mayor o menor conocimiento y manejo de una de las dos lenguas o monolingües en español. Por esta razón, insistimos en que el docente indígena requiere ubicar la lengua materna y segunda lengua de los alumnos ya que el éxito de las estrategias depende, en gran medida, de la adecuación y preparación de los recursos a utilizar, así como del tipo de preguntas que se harán a los niños durante el desarrollo de las actividades en el aula.

La educación indígena se caracteriza por la atención en lengua materna y la enseñanza de una segunda lengua. La lengua materna se identifica como la lengua adquirida en el hogar y desde la infancia. Es la que se adquiere de manera natural de los padres, en la familia, en la comunidad. La segunda lengua es la que se aprende de manera gradual una vez que se domina la lengua materna. Puede ocurrir que la primera sea la lengua indígena y la segunda el español, o viceversa.

Cuando un niño llega a la escuela, lleva un cúmulo de experiencias cuyo reconocimiento es punto de partida para cualquier aprendizaje posterior. Dicha experiencia se expresa en su lengua materna, principal medio de comunicación que posee. Hablar en lengua materna no es pronunciar solamente palabras, sino recrear el mundo de significados adquiridos desde la infancia. La lengua materna es uno de los instrumentos de expresión que rodean a los niños desde su más tierna edad, al hacer uso de ella; comprenden el medio natural y social que los rodea.

Todo tiene un nombre o una expresión verbal: las personas, animales, cosas o acciones que el niño ha hecho suyas, que le ayuda a comprender el mundo y hablar sobre él. Por tal motivo, resulta relevante que las actividades reflejen el uso de la lengua materna.

Las actividades didácticas que se proponen en este cuaderno deben iniciarse en la lengua materna de los alumnos; por lo tanto, es necesario averiguar cuál es su lengua materna y cuál su segunda lengua. Seguramente el maestro, desde el primer contacto con sus alumnos, puede apreciar la lengua de preferencia al interactuar con ellos, al observar en qué lengua se comunican con su familia y en la comunidad.

En las actividades Desde el aula, se plantean los propósitos, los materiales que se utilizarán y las secuencias de actividades didácticas que se deberán aplicar con los alumnos. Cada una de ellas está integrada por dos momentos de tratamiento pedagógico, el primero desarrollado en la lengua materna y el otro en la segunda lengua.

Se sugiere abordar los dos momentos en una misma sesión, sin embargo, en los casos en que las características lingüísticas del grupo no lo permitan, podrá trabajarse en dos sesiones.

En el apartado Recuperando la experiencia se pretende que el colectivo docente realice una evaluación y reflexión de la experiencia vivida desde la adecuación de las actividades de la estrategia así como de la pertinencia de las actividades desarrolladas en el aula. Con esto se espera que los participantes tengan un control continuo de la aplicación de las actividades que les permita decidir qué conocimientos hay que recuperar acerca de los logros alcanzados en el desarrollo de la expresión oral de sus alumnos en lengua materna y en segunda lengua, detecten las dificultades enfrentadas, socialicen la forma en que las resolvieron y discutan cómo mejorar los procedimientos didácticos en el aula.

El momento para trabajar el apartado anterior lo decidirán los maestros Desde el colectivo, para ello deberán tomar el acuerdo de una próxima reunión en la que socialicen sus experiencias de la adecuación y aplicación de las actividades Desde el aula, para dar respuesta a las inquietudes y reflexiones planteadas en el mismo.