XIII. CONCLUSIONES

NO importa en donde estemos, sea en la cocina, en el taller, en la escuela, en la oficina, en el hospital, en el campo, en la f�brica, estamos rodeados de productos derivados de la industria petroqu�mica.

En t�rminos generales se puede considerar que el gas natural, el gas LP, y varios de los hidrocarburos contenidos en las gasolinas de alto octano, son los principales proveedores de las materias primas b�sicas para la industria petroqu�mica.

Las olefinas y los arom�ticos obtenidos de los productos antes mencionados son las piedras angulares sobre las que descansa la industria de los materiales sint�ticos.

Indudablemente que no se cubrieron en este libro todos los aspectos de estos temas, ya que no se pretendi� ser exhaustivo. Pero s� quisimos presentar los �ltimos descubrimientos y aplicaciones de la petroqu�mica para que el lector pudiera comprobar que a�n hay mucho futuro en el fascinante mundo de la qu�mica del petr�leo.

M�xico es un pa�s rico en petr�leo, pero debemos comprender que para que esta riqueza natural sirva para cubrir nuestras necesidades en materia de vestido, salud, alimentaci�n, vivienda, transporte, etc., es indispensable tener suficiente conocimiento para generar la tecnolog�a de transformaci�n.

Para ello hace falta el trabajo y talento tanto de cient�ficos de todas las ramas de la ciencia, como de toda clase de personal t�cnico como son los qu�micos, bioqu�micos, ingenieros de todas las especialidades, etc.

El trabajo cient�fico nos permite establecer la comprensi�n y la explicaci�n de causas, principios, procesos y leyes universales, con el fin de incrementar la relaci�n entre el hombre y la naturaleza, independientemente del contexto pol�tico y social circundante, logrando con ello encontrar los satisfactores de necesidades comunes a la mayor�a de los seres humanos. El cient�fico no crea nada en el sentido absoluto, ya que el Creador del Universo es el que coloc� al hombre en un mundo lleno de maravillas que sencillamente hab�a que descubrir y desarrollar para solucionar los problemas que poco a poco han ido apareciendo a trav�s de la historia humana. �Qu� bueno que el hombre tenga el reto permanente de encontrar nuevas respuestas a sus necesidades, aplicando hoy algo que aprendi� ayer, bas�ndose en lo que otro hab�a hecho anteayer! Es as� como siempre existe la esperanza de desarrollar algo mejor, porque creemos que estamos lejos de agotar todas las posibilidades de conocimiento de nuestro planeta, sobre todo en esta �rea de la qu�mica del petr�leo.

Por otro lado, la tecnolog�a consiste en aplicar los conocimientos cient�ficos y emp�ricos para solucionar los problemas actuales que se definen en funci�n de las necesidades econ�micas, pol�ticas o sociales de una sociedad o grupo en particular. Por lo tanto, podemos decir que el desarrollo tecnol�gico de un pa�s no implica usar las tecnolog�as de los pa�ses desarrollados sino tratar de cubrir sus necesidades con sus propios recursos tanto humanos como materiales.

En cuanto al resto de la poblaci�n, la ayuda m�s grande que puede proporcionarle al pa�s es hacer un uso m�s racional de los energ�ticos como son el gas, la gasolina y la electricidad (generada con combust�leos), pues esto equivale a reducir el uso de la madera de los bosques para producir le�a y carb�n, a fin de poder contar con m�s material para hacer muebles y papel, de acuerdo a la ilustraci�n descrita al iniciar este libro.

El pago al presente esfuerzo colectivo ser� el de garantizarle a las futuras generaciones el poder de disfrutar de los beneficios que brindan los productos derivados de la petroqu�mica en todos los aspectos de la vida cotidiana.

�ndiceAnteriorPrevioSiguiente