CONTRAPORTADA

Numerosos científicos consideran que la civilización se inició con la llamada "conquista del fuego" por el hombre: al ser capaz de reproducirlo y controlarlo, alcanzó la capacidad de mejorar sus condiciones de vida, cambiar sus hábitos alimenticios y asegurar su sobrevivencia. El fuego, se sabe, es un proceso químico, y cuando se emplea, por ejemplo, para cocer los alimentos se opera cambio en las propiedades físicas y químicas de éstos, lo cual se traduce en un cambio dietético que ayudará a mejorar sustancialmente la condición humana.

La "conquista del fuego" es el primer paso de una larga marcha que se inicia en la prehistoria del hombre y que lo conduce actualmente a adueñarse de la energía en todas sus manifestaciones.

¿Cuál es la naturaleza del fuego, la del calor, la de la energía...? Aunque es mucho lo que se ha avanzado en el estudio de estas cuestiones, una explicación definitiva dista mucho de estar al alcance de los físicos. En la investigación, los científicos recurren a lo formulación de teorías y o la elaboración de modelos científicos. La consecuencia, aparte de sus logros, es que se crean lenguajes específicos, plagados de fórmulas matemáticas y químicas, que resultan inteligibles casi exclusivamente a los especialistas. Sin embargo, el presente libro constituye una demostración de que los científicos se preocupan también por hacer más accesibles sus conocimientos. Así, en Calor y movimiento se tratan temas como los fenómenos naturales y el hombre, la temperatura y el termómetro, la dilatación, el calor y el trabajo (base de lo revolución industrial), las reacciones químicas y la electroquímica, entre otros, en forma sencilla. La intención, de acuerdo con los autores, es "convertir la divulgación de lo ciencia en una disciplina que extienda a la sociedad los beneficios de la cultura científica".

Magdalena Rius de Riepen y Carlos Mauricio Castro Acuña han publicado ya, en La Ciencia para Todos, La química hacia la conquista del Sol. La primera, tras doctorarse en físico-químíca en la UNAM, ha cursado estudios de especialización en el Instituto de Fisico-Química de Gotinga, Alemania. El doctor Castro-Acuña considera. por su parte, que todo profesor universitario debe enseñar algo más que su asignatura: un espíritu universitario de ética profesional.

Diseño: Carlos Haces / Fotografía: Carlos Franco

InicioAnteriorPrevio