INTRODUCCI�N

Las aves han estado y est�n en contacto directo con el hombre de muy variadas formas; de hecho, cuentan entre los pocos animales verdaderamente silvestres que comparten la mayor�a de nuestras actividades y que podemos observar con facilidad. Adem�s, han sido compa�eras en calidad de mascotas, le han servido de alimento y deleite de muchas maneras. Es tan cercana esta relaci�n que en la historia de los pueblos siempre han estado presentes como s�mbolos m�gicos, religiosos, de buen y mal augurio, formando parte de su mitolog�a y su cosmovisi�n. Entre sus principales caracter�sticas y por lo que resultan tan atractivas, est�n los maravillosos plumajes, sus llamativos cantos y la capacidad de volar, lo que las hace due�as absolutas de los aires.

Sin embargo, la importancia de las aves en la estructura de los ecosistemas, la diversidad de sus formas, su complicada e interesante conducta, el misterio de su migraci�n y, sobre todo, la facilidad con que son observadas, las han hecho un grupo clave en el desarrollo de las ciencias biol�gicas. Baste mencionar los trabajos de precursores en el estudio de la biogeograf�a como el del ingl�s Philip Sclater, de finales del siglo XIX, sobre la delimitaci�n de las regiones biogeogr�ficas de la Tierra con base en la distribuci�n de las familias de aves; la importante contribuci�n de Charles Darwin a la teor�a de la evoluci�n a trav�s del estudio de los pinzones de las Gal�pagos; los estudios modernos sobre la ecolog�a, la evoluci�n y la biogeograf�a utilizando a las aves como modelo que han realizado Ernst Mayr, Robert Mac Arthur, Joel Cracraft, Miklos Udvardy y Daniel Simberloff y las importantes contribuciones a la metodolog�a sistem�tica antigua y moderna de Thomas Huxley, Hans Gadow, Alexander Wetmore, Charles Sibley y Jon Ahlquist, por mencionar algunos.

Por otro lado, la presencia de las especies de aves est� estrechamente relacionada con la condici�n de los h�bitat, pues muchas son muy sensibles a cambios m�nimos en ellos, por lo cual se les considera como buenos indicadores de perturbaci�n. Adem�s, la cacer�a, la tala de los bosques, los efectos de los contaminantes y la falta de conciencia del hombre al introducir fauna nociva en las islas, ha llevado a muchas especies de aves a extinguirse o estar al borde de la desaparici�n, como es el caso de los dodos de la isla Mauricio y los mieleros de Hawai. Se est�n haciendo grandes esfuerzos para conservar a las aves y sus h�bitat en todo el mundo, por parte de diversas instituciones, con el objeto de preservar la riqueza natural de la Tierra, que es producto de centenares de millones de a�os de evoluci�n.

El objetivo de este libro es introducir al lector en el fascinante mundo de las aves, conociendo muchos de los acontecimientos que las ata�en: su diversidad, la manera como desarrollan sus actividades y c�mo �stas afectan o son afectadas por los humanos. Todos estos rubros caen dentro del campo de estudio de la ornnitolog�a, que es la parte de la zoolog�a que estudia a las aves en todos sus aspectos.

La ornitolog�a es un campo cient�fico de gran actividad a escala mundial y suman ya varios miles los especialistas en el �rea. Sin embargo, es una ciencia que se ha visto favorecida grandemente por la participaci�n seria de aficionados, ya sea simplemente como observadores de aves en el campo, lo cual es muy com�n en Europa y Norteam�rica o por su contribuci�n activa en el conocimiento de la biolog�a de las especies y su conservaci�n. Es de nuestro especial inter�s dar a conocer los esfuerzos de los investigadores mexicanos o extranjeros que trabajan investigando las aves de nuestro pa�s, el cual ocupa uno de los primeros lugares en el mundo por su riqueza avifaun�stica. De las casi 10 000 especies de aves que hay en el mundo, alrededor de 11% habitan en M�xico, esto es aproximadamente 1 060 especies que son m�s de las que existen en Estados Unidos y Canad� en conjunto; adem�s, alrededor de 100 de ellas se encuentran solamente en M�xico, es decir, son end�micas.

La contribuci�n de los cient�ficos mexicanos a la ornitolog�a actual es muy importante pero, sobre todo, es importante la participaci�n de todos los mexicanos en los esfuerzos por conocer y preservar la avifauna nacional que es un recurso, como los muchos que tiene M�xico, vasto e irrecuperable