25. El hecho de que los niños no tengan la misma concepción del tiempo y de la muerte que tenemos los adultos nos ha puesto en aprietos al dar conferencias divulgatorias ante audiencias escolares. La noción de senectud y su relación con la cultura les resulta particularmente escabrosa. Cierta vez nos ayudamos pidiendo que levantaran la mano aquellos que tenían sus abuelos vivos. La mayoría lo hizo. Entonces les pedimos que la bajaran aquellos cuyos abuelos no usaban anteojos, o bastón, o no tomaban medicinas regularmente, o no tenían marcapasos cardiacos. Ninguno lo hizo. "Esos son recursos artificiales les explicamos, en la selva ningún tigre lleva anteojos, ninguna víbora usa marcapasos, ningún colibrí toma medicinas. Por eso mueren antes de llegar a la senectud". Una niñita de unos ocho años trató de cerciorarse "¿Quiere decir que si le escondo las medicinas a mi abuelita, le puedo dar matariles?" Y, al recibir una respuesta afirmativa, se sentó complacida, restregándose las manecitas.