En el proceso de investigaci�n consultamos obras generales sobre la pen�nsula de Yucat�n, pues convivieron de 1540 a 1857 el estado del mismo nombre y el distrito de Campeche, y numerosos libros son comunes, como es el caso de la Enciclopedia Yucatanense en nueve vol�menes, edici�n del gobierno de aquella entidad (1977). Como autor cercano a los hechos del siglo XIX y que pudo consultar material de archivos e impresos hoy de dif�cil acceso, Joaqu�n Baranda Quijano public� en 1907 el primer volumen de Recordaciones hist�ricas (CNCA, 1991), y en 1913 el segundo, obra promovida por su hijo Perfecto Baranda McGregor. Con una visi�n m�s cercana a los a�os actuales, Luis F. Sotelo Regil edit� en dos vol�menes Campeche en la historia, que llega hasta fines del siglo XIX, salvo una menci�n a los l�mites de Campeche con Quintana Roo en 1939, tercer estado que a partir de 1902 comenz� a compartir la pen�nsula (edici�n del autor, 1963-1964). Alejandro Negr�n Mu�oz escribi� Campeche. Una historia compartida, que es un bosquejo de la historia campechana desde la etapa colonial hasta 1919. El volumen se complementa con otros dos que contienen una compilaci�n de art�culos y autores diferentes bajo el t�tulo Campeche, Textos de su historia, escrito que sustenta documentalmente la investigaci�n (Instituto Mora, 1991). Finalmente, hemos dispuesto del trabajo de Juan Jos� Bol�var Aguilar titulado Monograf�a del estado de Campeche (Universidad Aut�noma del Carmen, 1996). Un auxiliar en la consulta general fue la obra con anexo de Michel Antochiw titulada Historia cartogr�fica de la Pen�nsula de Yucat�n (Gobierno de Campeche, 1994).
Han sido fundamentales los trabajos de H�ctor P�rez Mart�nez y Juan de Dios P�rez Galaz, Bibliograf�a del estado de Campeche (Gobierno de Campeche, 1943) que constituye el material necesario para emprender cualquier investigaci�n. El texto citado abri� un campo inadvertido hasta entonces. Una continuaci�n de esta obra es la Bibliograf�a contempor�nea del estado de Campeche que compendi� con acuciosidad y talento Silvia Molina (Gobierno de Campeche, 1996). Completa un largo periodo participando de las aportaciones culturales de m�s de 50 a�os. No por breve es menos valioso el trabajo de Alejandro Negrín, Campeche. Bibliograf�a comentada (Instituto Mora, 1990).
Al lado de los libros consultados para realizar el esquema general de la obra, es necesario mencionar la colecci�n que dirigi� Sierra Brabatta entre 1967 y 1972 que sirvi� para alimentar precisamente un empe�o editorial como el que hoy se emprende. El nombre de cada uno de los trabajos editados bajo el patrocinio del gobernador Carlos Sansores P�rez es, de Sierra Brabatta: Campeche. Imagen de una ciudad. Batalla de Champot�n en 1517 (1967); de Rogelio Rivera Mena, una selecci�n de art�culos: Semblanza de un periodista: H�ctor P�rez Mart�nez (1968); de Jos� Antonio Calder�n Quijano: Las murallas de Campeche (1968), selecci�n de una obra mayor; de Jos� Dzib Cardozo, un estudio preliminar sobre el archivo de la jefatura Pol�tica y Militar: Documentos para el estudio de la revoluci�n del 7 de agosto de 1857 (1968); de Miguel Civeira Taboada: Cr�nicas de la Isla del Carmen (1968); de Francisco Mart�nez de Arredondo, John L. Stephens, Justo Sierra O'Reilly, Gustavo Mart�nez Alom�a, Jos� Felipe Castellot y Jos� T. Cervera: Xtacumbilxunaan. Dzitbalch�. B�cal (1968); de Luis �lvarez Barret: El maestro Beauregard y la educaci�n en Campeche (1969); Carlos McGregor Giancinti: Ra�z, resaca y celaje de Campeche (1969); de Miguel Civeira Taboada: Documentos para la historia de la Isla del Carmen (1969); de Agust�n Y��ez, Silvio Zavala, Andr�s Ituarte y Alfonso Reyes: Justo Sierra (1969); como compilaci�n documental: Perfil hist�rico de Champot�n (1969); de Rom�n Pi�a Chan: Campeche antes de la Conquista (1970); de Luis �lvarez Barret: El Campeche desconocido (1970); de Elo�sa Ruiz Carvalho de Baqueiro: Tradiciones, folklore, m�sica y m�sicos de Campeche (1970); una reuni�n de testimonios: Visi�n hist�rica de la Iglesia de San Francisco (1970); una selecci�n de documentos: Juan Carb�. Pol�tico y periodista (comp. 1970); discursos como legislador y documentos del archivo diplom�tico: Juan S�nchez Azcona. Tribuno, legislador y diplom�tico (comp. 1970); intervenciones compiladas del peri�dico del Congreso de la Uni�n: Diputaciones de Campeche en el Recinto Constitucional, 1857-1872 (1972).
Finalmente, en lo general tambi�n fueron de utilidad el Diccionario geogr�fico, hist�rico y biogr�fico de Campeche de Juan de Dios P�rez Galaz (Gobierno de Campeche, 1979), y las dos ediciones que public� Sierra Brabatta del Diccionario biogr�fico de Campeche (Gobierno de Campeche, 1991; Ediciones de la Muralla, 1997).
Rom�n Pi�a Chan es uno de los m�s recios estudiosos de la arqueolog�a de los mayas. Sus obras son imprescindibles para cualquier investigaci�n en ese sentido: Arenas del tiempo recuperadas (Gobierno de Campeche, 1992) y Edzn�. Gu�a de la zona arqueol�gica (INAH). De Joaqu�n Mart�nez Rosado: Breve Historia de la arqueolog�a en Campeche (Universidad de Campeche, 1990). Ilustrativo result� el ensayo "Los Mayas, los hijos del tiempo", que se public� en National Geographic (Washington, 1975). De Charles Gallen Kamp: Los Mayas (Hermes, 1959). El trabajo de Sylvanus G. Morley, maestro en la materia, apareci� en el tomo II de la Enciclopedia Yucatanense. Finalmente citaremos el ensayo de Arturo G�mez, "Campeche en la Conquista y Colonizaci�n del Mundo Maya" (Revista de Historia de la Fac. de Filosof�a y Letras, UNAM, 1993-94).
Los a�os de la Conquista ata�en al impacto de los descubrimientos, y como fuentes para su investigaci�n se distinguen por la amplitud de la cr�nica y la historia letrados y eclesi�sticos, como fray Juan de Torquemada: Monarqu�a indiana (Ch�vez Hayhoe, 1943); fray Diego de Landa, verdugo de la cultura: Relaci�n de las cosas de Yucat�n (Rbredo, 1938); fray Antonio de Remesal: Historia general de las Indias (Guatemala, 1932); Ignacio Rubio Ma��: Notas y acotaciones a la historia de Yucat�n, de fray Diego L�pez de Cogolludo (Academia Literaria, 1957), y la obra ineludible de Bernal D�az del Castillo: Historia verdadera de la conquista de la Nueva Espa�a, tomo I (Espasa Calpe, Madrid, 1942). A lo anterior debemos agregar el libro al que Agust�n Y��ez hizo la introducci�n, selecci�n y notas: Cr�nica de la Conquista (UNAM, 1993).
Dif�cilmente las historias generales y los libros de cr�nicas eluden el asunto de los piratas, pero debemos se�alar como obras fundamentales, desde luego, la de H�ctor P�rez Mart�nez: Pirater�as en Campeche, siglos XVI, XVII y XVIII (Corunda, 1994). Como estudio con una visi�n m�s amplia, la obra de Juan Ju�rez Moreno: Corsarios y piratas en Veracruz y Campeche (Sevilla, 1972). Rom�n Pi�a Chan escribi� Campeche durante el periodo colonial (Gobierno del Estado, 1987); de Juan de Dios P�rez Galaz: Piratas y corsarios en los mares de M�xico y del mundo (Panorama, 1992), y el art�culo "Filibustierres", que consultamos en el peri�dico Indicador Federal de la Hemeroteca Nacional de la ciudad de M�xico, edici�n del 14 de julio de 1825.
Es necesario no perder de vista que algunas obras son complementarias en uno y otro cap�tulo, como es el caso de piratas y murallas. Sobre el �ltimo asunto mencionaremos la obra de Jos� Antonio Calder�n Quijano: Historia de las fortificaciones de Nueva Espa�a (Sevilla, 1953), as� como el trabajo del ingeniero militar Miguel S�nchez Lamego: La vida hist�rica de las fortificaciones de Campeche, sobretiro del "Bolet�n" de la Sociedad Mexicana de Geograf�a y Estad�stica (1932).
Para el cap�tulo sobre el Carmen, por la importancia del lugar, existe una numerosa bibliograf�a de menci�n obligada en las relaciones peninsulares o de la entidad. Consultamos los trabajos de Justo Sierra O'Reilly: La cuesti�n del territorio del Carmen (J. M. Peralta, 1856) que fue publicado por entregas en el peri�dico La Uni�n liberal que se editaba en Campeche; Arturo Shiels: El partido del Carmen que public� el "Bolet�n" de la Sociedad Mexicana de Geograf�a y Estad�stica (1870); un primer esfuerzo integral fue el que realizaron varios autores en una modesta edici�n mimeogr�fica que patrocin� el Liceo Carmelita: Ensayo hist�rico de ciudad del Carmen (1958); esfuerzo notable ya que contiene noticias hist�ricas, econ�micas, de flora y fauna, fue el libro que integr� Juan Nicolau Acal bajo el t�tulo de �lbum carmelita (1910), y que fue precisamente publicado para la conmemoraci�n del Centenario de la Independencia. No dejamos de advertir el no por sencillo menos valioso folleto de Leopoldo Cervera Certucha: Fichas hist�ricas de Ciudad del Carmen (1961); de igual modo citaremos la edici�n de Juan Jos� Bol�var: El territorio del Carmen. Sus or�genes y repercusi�n en el estado de Campeche (1979). La hemerograf�a es numerosa, pero podemos citar el documento "Exposici�n que el vecindario de la Villa del Carmen dirige al Comodoro Perry, pidi�ndole que no desampare esta Isla", en El Monitor Republicano de la capital de la rep�blica del 16 de junio de 1848; �Aduana Mar�tima de la Isla del Carmen", informaci�n correspondiente a 1903 publicada en El Informador de Campeche el 15 de junio de 1973; de Jos� Ignacio Rubio Ma��: "Ocupaci�n de la Isla de T�rminos por los ingleses" que apareci� en las p�ginas del Bolet�n del Archivo General de la Naci�n (tomo XXIX, 1953). Debemos agregar que Miguel Civeira Taboada asumi� con seriedad y especial atenci�n el tema de El Carmen, y aparte de los trabajos citados anteriormente, se debe considerar el folleto La Isla y su H�roe (Municipio del Carmen, 1973) y Documentos de la Isla del Carmen, conferencia en la Academia Nacional de Historia y Geograf�a (1977).
Son obras fundamentales para el �rbol del tinte dos libros editados en el mismo a�o: La regi�n del palo de tinte: El Partido del Carmen, Campeche, 1821-1857, estudio de Claudio Vadillo L�pez (Fondo Estatal para la Cultura y las Artes, 1994), que solamente se ocupa de un periodo; y de Carlos Enrique Ruiz Abreu, Se�ores de la tierra y el agua (Universidad Ju�rez de Tabasco, 1994). Tambi�n fue un buen auxiliar fue el libro de Jos� Antonio Calder�n Quijano: Belice, 1663-1821 (Universidad de Sevilla, 1944).
Para los primeros a�os del siglo XIX, resultaron de obligada consulta las historias generales citadas al principio, pero tambi�n se consultaron los dos vol�menes de Francisco �lvarez: Anales hist�ricos de Campeche. Raza y tierra, la Guerra de Castas y el henequ�n, de Mois�s Gonz�lez Navarro (El Colegio de M�xico, 1970); la Constituci�n Federal de 1824, tomo II de Cr�nicas (Comisi�n para el Sesquicentenario, 1974); de Luis Maldonado Venegas "La evoluci�n del federalismo en Am�rica y sus nuevas perspectivas" que se public� en la revista Quorum (C�mara de Diputados, mayo de 1997). Igualmente consultarmos los art�culos de Miguel Civeira Taboada "El cuartel de dragones en 1817" (El Informador de Campeche, julio de 1971), "Viajero en el Real Camino: Hecelchak�n" (El Informador de Campeche, febrero de 1973), "Viajero en el Real Camino: Bolonchenticul (El Informador de Campeche, mayo de 1973). Los art�culos de Justo Sierra O'Reilly: "Los b�rbaros" (El F�nix, agosto de 1849), "Incendio en Belice" (El F�nix, septiembre de 1856) y P�ginas Escogidas del mismo Sierra O'Reilly (UNAM, 1996). Adem�s, de Humberto Herrera Baqueiro "El escudo de Campeche" (4 de octubre. Revista Conmemorativa, febrero de 1990) y "�D�nde est� el Paullada?" (Deslinde, diciembre de 1992).
La creaci�n del estado y los 50 a�os que siguieron tienen una bibliograf�a extensa, en la que deben se�alarse los dos t�tulos fundamentales para la discusi�n como fueron los presentados al Congreso de la Uni�n en 1861: de Tom�s Aznar Barbachano y Juan Carb�: Memoria sobre la conveniencia, utilidad y necesidad de erigir constitucionalmente en Estado de la Confederaci�n Mexicana el antiguo distrito de Campeche (Cumplido 1861 y Campeche, 1957); de Juan Su�rez y Navarro Informe sobre las causas y car�cter de los frecuentes cambios pol�ticos ocurridos en el estado de Yucat�n (Cumplido, 1861 y Ediciones de la Muralla 1979). De Francisco �lvarez son los documentos en el segundo volumen de Anales hist�ricos de Campeche, que cubren el periodo de 1861 a 1910 (Colegio de San Jos� de Artes y Oficios, M�rida, 1912). El libro de Sierra Brabatta cubre de 1857 a 1960: Acci�n Gubernamental en Campeche (Talleres de Impresi�n de Estampillas y Valores, 1972).
El gobierno del fundador del estado y sus consecuencias se informan en trabajos como el de Jos� Dzib Cardoso: Pablo Garc�a Montilla, de car�cter biogr�fico (SEP, 1967) y el reciente folleto, una reimpresi�n de Santiago Mart�nez Alom�a: Lic. Pablo Garc�a y Montilla (Gobierno del Estado, 1995). En fuentes hemerogr�ficas consultamos el art�culo "Pablo Garc�a, el Hacedor" (El Informador de Campeche, agosto de 1971) y el libro de Sierra Brabatta en torno a la Intervenci�n francesa: Documentos sobre la Intervenci�n y el Imperio en Campeche, Chiapas, Oaxaca, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucat�n (Secretar�a de Hacienda, 1966) y Alejandro Garc�a. Pr�cer de la Rep�blica (Gobierno del Estado, 1973). Documentos de Juan S�nchez Azcona y Joaqu�n Baranda aparecen reunidos en: Pablo Garc�a en el banquillo de los acusados (Ediciones de la Muralla, 1979).
El largo periodo de la influencia de Joaqu�n Baranda, que se extendi� de 1870 a principios del siglo XX, est� documentado en las colecciones de peri�dicos oficiales de Campeche: El Esp�ritu P�blico (1857-1869), La Discusi�n (1870-1875), La Nueva Era (1881) y Peri�dico Oficial (1889-1910). Una investigaci�n en el Diario de los Debates de la C�mara de Diputados le permiti� a Sierra Brabatta integrar el libro: Campeche en la Legislatura Federal. 1857-1914 (Gr�ficas Galeza, 1960). Tambi�n encontramos descritas sus obras en el trabajo de Alberto Vald�s Inchausti: Pedro Baranda, General y pol�tico de la rep�blica (SEP, 1967).
Son muy �tiles el folleto titulado Notas de Econom�a Regional. Agricultura, Colonizaci�n y V�as F�rreas. 1857-1910 (edici�n limitada de la Secretar�a de Hacienda, 1966) y de Fausta Gant�s: Ferrocarril Campechano. 1900-1913 (Gobierno del Estado, Universidad de Campeche, Instituto de Cultura, 1996).
En lo que se refiere a Campeche, la revoluci�n mexicana tiene dos vertientes: la participaci�n de los hombres originarios del estado con Venustiano Carranza y �lvaro Obreg�n, y los sucesos en la regi�n. En este �ltimo aspecto, cuenta con las siguientes fuentes: de Francisco �lvarez, el tercer volumen de los Anales hist�ricos de Campeche 1911-1916 (Gobierno del Estado, 1977); de Sierra Brabatta: Campeche en la Revoluci�n, que es la primera relaci�n y acopio documental sobre el tema (Editorial Ah Kin Pech, 1961), y el m�s reciente trabajo de Jos� Alberto Abud Flores: Campeche. Revoluci�n y movimiento social (INEHRM, Universidad de Campeche, 1992).
Los a�os del Partido Socialista Agrario, que comprenden de 1920 a 1939, se han nutrido fundamentalmente con las memorias de Javier Romero que se encuentran en una serie de art�culos period�sticos que public� cada ocho d�as bajo el t�tulo general de "La historia es un follet�n" (Jueves de Exc�Isior, 28 de marzo a 7 de noviembre de 1991). No hay libros concretos sobre los personajes de esa �poca o los sucesos que enfrentaron; informes oficiales o art�culos dispersos han permitido reconstruir esa etapa. La fuente tradicional es, sobre todo, 100 A�os de Loter�a Campechana, investigaci�n, recopilaci�n y documentaci�n de Diana Pozos Lanz y Juan Carlos Saucedo (Gobierno del Estado, 1995). Adem�s consultamos por Internet los archivos hist�ricos de la UACAM (1997).
De 1939 a 1991, por lo que se refiere a las sucesiones gubernamentales, fue de provecho la consulta de los art�culos semanales de Rafael Vega Al� en su columna "Jaque Mate" (Novedades de Campeche, enero a julio de 1996). Es importante el libro de Silvia Molina: Imagen de H�ctor (Cal y Arena, 1992) sobre el gobierno de P�rez Mart�nez. Por lo que se refiere al chicle, el trabajo testimonial de Ram�n Beteta: Tierra del Chicle (Editorial M�xico Nuevo, 1951) es ilustrativo. Con noticias y notas econ�micas, tambi�n fue �til el de Federico Heuer La Industria del chicle (s.p. 1945). La biblioteca Miguel Lerdo de Tejada de la Secretar�a de Hacienda conserva numerosos art�culos, noticias y reportajes sobre la resina del zapote, organizados en numerosas carpetas por a�os. Asimismo, consultamos las carpetas que guardan noticias y art�culos sobre la gesti�n de Alberto Trueba Urbina.
La primera vez que se public� una memoria debidamemte presentada y documentada sobre las jornadas de trabajo, fue la que dio a conocer la tarea sexenal del coronel Jos� Ortiz �vila: un grueso volumen con fotograf�as a color y una relaci�n del avance de cada uno de los ramos p�blicos; dirigi� la edici�n Miguel Messmacher: Campeche. An�lisis Econ�mico-Social (1967). Un resumen de la obra de gobierno de Carlos Sansores P�rez se debe al periodista Cirino P�rez Aguirre, en Novedades (9 de agosto de 1972). En lo que se refiere a Rafael Rodr�guez Barrera, consultamos la nota relativa al sexto informe que apareci� en Exc�lsior (9 de agosto de 1979).
Las ediciones sexenales contienen informaci�n sobre las tareas relizadas y, en ese sentido, el libro Campeche, Abelardo Carrillo Zavala 1985-1991, ha sido imprescindible para acercarnos a los datos que corresponden al sexenio de la concordia. En lo referente al sector pesquero, la revista mensual que dirigi� el escritor y periodista Rodrigo Moya: T�cnica Pesquera es una fuente de primer orden (1976-1982). El aspecto industrial se encuentra en el folleto Productos Pesqueros Mexicanos en Campeche (Ediciones Mundo Marino, 1982). Un trabajo reciente, aunque parcial, ya que �nicamente se ocupa de la industria camaronera, es el de Luis Fernando Leriche Guzm�n: Isla del Carmen. La historia indecisa de un puerto exportador. 1947-1982. (Gobierno del Estado, Universidad del Carmen, Instituto de Cultura, 1995). La informaci�n para la �poca actual se encuentra en el Atlas del estado de Campeche (Gobierno del Estado, 1997).
Existe un considerable n�mero de ediciones sobre los siglos XVI al XIX, pero lo que corresponde a Campeche tiene carencias notables, apenas suplidas por trabajos literarios espec�ficos sobre determinada materia, o bien las p�ginas de peri�dicos y revistas regionales.
