Son ya varias las ocasiones en las que he oído, en boca de algún locutor de televisión, el plural buroes. Me parece que la mayoría de los hispanohablantes prefiere la forma burós. Vale la pena, entonces, repasar brevemente la normatividad de este caso dentro de las reglas de formación del plural de los sustantivos españoles.
1) Parece ser que en las primeras ediciones de la gramática académica se recomendaba la forma en -ós. Todavía en una edición mexicana del siglo XIX (Gramática de la lengua castellana por la Real Academia, Imp. y Lit. del Colegio de Artes y Oficios, México, 1872) puede leerse que: "los (sustantivos) que acaban en alguna de las vocales á, í, ú, acentuadas, forman de ordinario el número plural añadiendo la sílaba es al singular (...), pero si dicha vocal es la é o la ó acentuada, se forma siempre el plural, lo mismo que cuando no está acentuada, con sólo añadir una s (...) de landó, landós, de rondó, rondós" (p. 13).
2) Probablemente a fines del siglo XIX o principios del XX cambió el criterio de la Real Academia. Así en la edición de 1931 (Real Academia Española, Gramática de la lengua española, Espasa-Calpe, Madrid, reimpresa varias veces), la regla que comento aparece modificada: "los (sustantivos) que terminan en vocal acentuada reciben en el plural la sílaba es, como bajá, carmesí, rondó, tisú -bajaes, carmesíes, tisúes" (p. 18). Aunque añade inmediatamente después que "no faltan ejemplos de haberse usado en plural (...) vocablos de esa misma índole con el simple aditamento de la s".
3) Esta modificación de la regla no contó con el aval de todos los gramáticos. Baste un ejemplo. En su excelente tratado, Rafael Á. de la Peña (Gramática teórica y práctica de la lengua castellana, Herrero Hnos., México, 1898), después de transcribir la regla anterior, hace el siguiente señalamiento: "parece sin embargo más conforme con el uso actual añadir nada más s a las voces agudas de más de una sílaba terminadas en ó o en ú de suerte que los plurales de landó y tisú serán en este caso landós y tisús" (p. 70).
4) A ello pudo deberse probablemente que la Academia Española decidiera por fin modificar la regla. Ciertamente, esta nueva propuesta aparece en el Esbozo de una nueva Gramática de la lengua española (Espasa-Calpe, Madrid, 1973), que, como señala su nombre, no tiene aún valor normativo: sin embargo es claro que la posición académica ha cambiado. Allí puede leerse que "han consolidado (...) el plural en -s los polisílabos determinados en -é, ó: cafés, canapés, chapós, dominós, gachós, landós, paletós, rondós" (p.185).
En resumen, parece recomendable formar con una sola -s el plural del vocablo de origen francés buró que en México al menos, equivale a mesa de noche y, por tanto, debemos decir burós y no *buroes.