FONDO 2000 presenta
una selección de los Cuentos románticos de Justo
Sierra. Llama la atención el género y el adjetivo que
lo acompaña, pues el autor es más recordado por su vida
política. Fue diputado al Congreso de la Unión, magistrado
de la Suprema Corte de Justicia, subsecretario y luego ministro de Instrucción
Pública y Bellas Artes, cargo desde el cual fundó en 1910,
la Universidad Nacional de México. Sin embargo, Justo Sierra
realizó una obra literaria variada e importante, como periodista
y ensayista prolífico, poeta, novelista, cuentista, dramaturgo
e historiador. Su preocupación por la historia, la sociología
y la política lo llevó a escribir su obra fundamental,
Evolución política del pueblo mexicano, y la detallada
biografía Juárez, su obra y su tiempo.
Nacido en Campeche en 1848, Justo Sierra Méndez fue hijo de
Justo Sierra O'Reilly, destacado jurista yucateco. Inició sus
estudios en Mérida y posteriormente se matriculó en
el Liceo Franco-Mexicano de la ciudad de México. Pasó
luego al Colegio de San Ildefonso y, en 1871, se tituló de
abogado. Frecuentó las tertulias literarias de Ignacio Manuel
Altamirano y se dio a conocer a través de sus colaboraciones
en El Monitor Republicano, la revista El Renacimiento
y los periódicos El Domingo, El Siglo XIX, La Tribuna, La
Libertad y El Federalista. Los textos reunidos aquí bajo el título La Sirena y otros cuentos, podrían haber llevado, según el propio autor, el encabezado de Amor y muerte, pues están impregnados de "lirismo sentimental y delirante". El lector descubrirá una faceta poco conocida de quien ha pasado a la historia como uno de los artífices del Porfiriato, quizá el más crítico entre los allegados al dictador y uno de los más reconocidos humanistas mexicanos de principios del siglo XX. En 1912 fue nombrado ministro plenipotenciario en España en cuya capital murió ese mismo año. Sus restos fueron traídos a México, depositados en la Rotonda de los Hombres Ilustres y, en 1948, fue declarado "Maestro de América" por la Universidad Nacional Autónoma de México. Con estas páginas nos acercamos al 150 aniversario de su nacimiento, recordándolo como cuentista, a través de esos relatos que, según él mismo, se conformaría con que pudieran tener aceptación y gusto "entre los muchachos que despiertan y las niñas que sueñan". |