Catarino |
“el ‘t�o’ era
bueno cuando otorgaba la vida; pero el ‘t�o’ era malo cuando
causaba la muerte.” |
El Cura |
“‘t�o’ le dicen, porque lo suponen hermano de
‘tata Dios’ y es para ellos tan poderoso, que el pueblo entero
puede dormir tranquilo si se sabe bajo su protecci�n[…] Pero el
‘t�o’ es cruel y vengativo, con su vida pagar� quien lo injurie o
pronuncie su nombre[…] Esto �ltimo queda reservado tan s�lo al m�s viejo
de la comunidad. Bajo el amparo del ‘t�o’ los huicholes viajan
confiados, pues creen que contando con sus influencias, las serpientes se
apartar�n del camino, los rayos descargar�n a distancia y todos los enemigos
quedar�n maniatados. No hay enfermedad que resista al ‘t�o’ y
s�lo mueren los hombres que no se encuentran en gracia de �l.” |
Mateo San Lucas |
“Del ‘t�o’ que
es estimulante de la amistad y del amor, suave narc�tico, sabio consejero; que
con su ayuda, los hombres se har�an mejores, porque nada los unir�a m�s que la
mutua felicidad y el completo entendimiento. El ‘t�o’ hace tierno
al coraz�n y liviano el cerebro.” |
Narrador-Investigador |
“Lo he visto en sue�os, s�,
trajeado con las suntuosas galas que llevan los huicholes en sus ceremonias al
Padre Sol […] La tarde en que lo descubr� dirigiendo el tr�nsito de
veh�culos en los cruceros de las avenidas Ju�rez y San Juan de Letr�n, estaba
magn�fico: el rostro p�treo inconmovible, ali�ado con un bezote de turquesa, la
testa tocada con un penacho de plumas de guacamayo, los pies con sandalias de
oro y su �ndice horrible, hecho de carne verde de nopal y armado con una u�a de
p�a de maguey.” |
Narrador |
“el ‘t�o’ no
es otra cosa que el ‘peyote’ �verdad?”
|
Mateo San Juan |
“El peyote es conocido de
ustedes hace muchos a�os, sus efectos son vulgares, intoxicantes, pasajeros y
desde luego m�s da�osos que ben�ficos. El t�o es otra cosa; hasta ahora, si no
somos los huicholes, nadie ha probado sus propiedades
extraordinarias”. |