La aplicación de las políticas liberales, encarnadas en la ley Juárez que abolió el fuero eclesiástico y la dictada por Comonfort sobre desamortización de bienes de las comunidades, precipitaron la inconformidad violenta de los conservadores, principalmente en las ciudades de México, Puebla, Querétaro y San Luis Potosí. Al grito de "Religión y Fueros" se sublevó la guarnición en San Luis a principios de diciembre 1856, al mando del coronel Manuel María Calvo. Los amotinados apresaron al gobernador Aguirre y una junta de conservadores prominentes nombró gobernador del departamento a Juan Othón, quien decretó de inmediato la prisión de muchos liberales y el destierro de otros. Othón expidió un decreto el 25 de diciembre por el que declaró nula la ley de desamortización del 25 de junio.
Desiderio Samaniego, propietario de fincas rústicas valiosas en los estados de San Luis Potosí, Querétaro y Guanajuato llegó a la ciudad de San Luis y fue reconocido como primer jefe de la revuelta conservadora. Impuso un préstamo forzoso de 200 mil pesos que tomó del consulado inglés. Otros militares conservadores, como los generales Luis G. Osollo y Tomás Mejía, se reunieron en la ciudad de San Luis Potosí para extender el pronunciamiento, un año antes de la emisión del Plan de Tacubaya, reconocido como el inicio formal de la guerra de Reforma.
Ante la concentración de fuerzas conservadoras en la ciudad de San Luis, los grupos de liberales se desplazaron hacia el rumbo de Guanajuato y hacia el norte, a Ahualulco, Moctezuma y Picachos; continuamente merodeaban en las haciendas en busca de animales, armas, pasturas y dinero. A mediados de enero trabaron combate en la ciudad de San Luis Potosí. El exgobernador Aguirre, que contó con el apoyo de Jesús Terán, regresó a San Luis procedente de Aguascalientes, con otros liberales como Eulalio Degollado. Las fuerzas liberales confiaban en el respaldo del principal jefe militar del norte, Santiago Vidaurri, que en febrero de 1857, con la fuerza de sus tropas, hizo que los conservadores abandonaran la plaza. El gobernador Othón fue aprehendido y el general Osollo, herido de gravedad, se entregó.
Al asumir los liberales el control de la región, ocupó la gubernatura el propio José María Aguirre quien el 26 de marzo promulgó en San Luis la Constitución de 1857.