Organización

El cuaderno está formado por ocho fichas con actividades para trabajar en dos momentos: Desde el colectivo docente y Desde el aula. Además, al final de cada ficha se incluye el apartado Recuperando la experiencia.

Desde el colectivo docente

Son secuencias de actividades diseñadas para ser trabajadas y vividas por todos los maestros de la escuela junto con su director, y constituyen primordialmente un espacio de reflexión, análisis, intercambio de experiencias y establecimiento de acuerdos para desarrollar acciones conjuntas encaminadas a la promoción de la formación valoral en las aulas y la escuela. Su propósito viene implícito en el subtítulo de cada ficha.

Al inicio de cada ficha se incluye una actividad que representa el puente entre la estrategia precedente y la que se pretende trabajar, con el fin de que el colectivo comparta los resultados de su puesta en práctica y de las adecuaciones que haya tenido que realizar.

Las actividades están planeadas para desarrollarse en una hora y media aproximadamente, aprovechando los espacios del Consejo Técnico, o en otras oportunidades que el colectivo determine, dependiendo de sus posibilidades, intereses y tiempos.

Desde el aula

En este apartado se proponen actividades que cada maestro deberá desarrollar en su salón de clases con el objetivo de promover la formación valoral en sus alumnos. Desde el inicio se plantea el propósito que se pretende alcanzar y los materiales sugeridos para desarrollar las actividades.

De acuerdo con sus características, se propone que dichas actividades se desarrollen en diferentes momentos a lo largo del ciclo escolar, con las adecuaciones necesarias y pertinentes según el grado escolar y las características de los alumnos y del contexto.

Recuperando la experiencia

Constituye un espacio para que el maestro, en forma individual e inmediatamente después de aplicar la estrategia con sus alumnos, reflexione críticamente sobre el trabajo realizado con los alumnos a partir de una serie de preguntas, de manera que esté en posibilidad de analizar los aspectos que requieran modificarse con vistas a posteriores aplicaciones. Este apartado se retoma al inicio del trabajo con la siguiente ficha que el colectivo decida abordar, de modo que sirva también como un espacio de retroalimentación en grupo.

Las fichas no tienen una secuencia establecida, por lo que el colectivo será quien decida en qué orden las va a trabajar, con excepción de “Hay de ambientes a ambientes”, que debe trabajarse primero.