La conquista de América
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La conquista de la región andina

Esta estatua de Francisco Pizarro, construida en Trujillo, la ciudad natal del conquistador, nos da una idea de la impresión que los jinetes españoles producían en los guerreros indígenas.



A principios del siglo xvipequeños grupos de españoles exploraron el Istmo de Panamá. Como sabes, Vasco Núñez de Balboa, uno de sus jefes, fue el primero en tocar las aguas del Mar del Sur, es decir, del Océano Pacífico.

En esa región se fundó una pequeña colonia llamada Darién. No era próspera y el clima tropical era difícil de soportar, pero fue ahí donde a través de comerciantes indígenas, los españoles se enteraron de que hacia el sur, cerca de la costa, había un reino inmensamente rico, en el que hasta los objetos de uso común eran de oro.

Esas noticias despertaron la ambición de muchos españoles, que soñaban con igualar las conquistas de Cortés. De todos esos soldados, el más tenaz fue Francisco Pizarro, quien en 1525 y 1527 organizó dos pequeñas expediciones hacia el reino de Birú, como llamaban entonces a Perú.

Esos viajes no dejaron beneficios materiales, pero Pizarro confirmó la riqueza del imperio inca y logró obtener el apoyo del emperador Carlos V para continuar con sus planes. Preparó una expedición mayor, con unos 200 soldados españoles y en 1532 entró en el territorio de los incas.



Las epidemias en el siglo xvi

Las epidemias fueron uno de los más terribles azotes sufridos por la población indígena en el siglo xvi. Ciertas enfermedades comparativamente leves y que eran comunes entre los europeos, como la viruela o los trastornos gripales, provocaban daños enormes a la salud de los nativos de América, pues sus defensas orgánicas eran inútiles ante virus desconocidos en nuestro continente.

La primera gran epidemia fue de viruela. Empezó en el Caribe en 1519 y desde septiembre de 1520 afectó a la población del Valle de México, en especial a los defensores de Tenochtitlan.

Durante el resto del siglo, por lo menos otras cuatro epidemias se extendieron en Nueva España.

No es fácil calcular el daño producido por esas enfermedades, pero es probable que cerca de la mitad de la población indígena muriera como consecuencia de las epidemias en sólo 50 años.

Una gran desmoralización afectó a la población sobreviviente, no sólo por la muerte de familiares, vecinos y amigos, sino también porque no podían explicar lo que estaba sucediendo. Los mayas, por ejemplo, inventaron el mito de que las deidades del mal llevaban por la noche el contagio de casa en casa. Además, ya que los españoles no enfermaban, parecía evidente que las epidemias eran un castigo que los dioses enviaban a los indígenas.

Los indígenas apreciaban los objetos finamente trabajados en oro. Por eso no entendían por qué los conquistadores los fundían para convertirlos en toscas monedas.



Las tropas de Pizarro encontraron un imperio debilitado por la lucha entre dos hermanos, Atahualpa y Huascar, quienes pretendían ocupar el trono del Inca. El primero de ellos había vencido y ocupaba con su ejército la parte norte del imperio. Al igual que en México, los españoles habían encontrado aliados entre los indígenas. Los incas estaban divididos, pero además otros pueblos querían liberarse de su dominación.

Alentado por esos apoyos, Pizarro envió emisarios a Atahualpa, pidiéndole que se reuniera con él. Le dijo que sus intenciones eran pacíficas. Atahualpa accedió. Se sentía seguro con un ejército de miles de guerreros que le miraban como a un dios. Avisó a Pizarro que se reunirían en Cajamarca, población de las montañas andinas.

Emperador inca, pintura peruana del siglo xvi.

El Inca llegó al sitio de la reunión rodeado de la nobleza indígena, ostentando su riqueza, pero indefenso. Pizarro tenía su plan preparado: atacó a la comitiva de Atahualpa y de inmediato lo capturó. En el combate que siguió murieron centenares de jefes incas y el ejército del imperio, sin tener quién lo mandara, se dispersó en desorden.

Pizarro aprovechó la situación. Marchó hacia Cuzco, la capital inca y la tomó en 1533. Antes había asesinado a Atahualpa, después de que éste le había pagado un inmenso rescate para conservar su vida. Los españoles fundaron después una nueva ciudad, Lima, para gobernar desde ahí los territorios conquistados.

El poderío de los incas se había derrumbado, pero pasaron casi 50 años para que se estabilizara la dominación española. Hubo varias rebeliones indígenas, que pretendían recuperar la antigua independencia; pero además, entre los jefes españoles se desataron la envidia y la violencia. Pizarro, varios de sus hermanos y otros jefes españoles fueron asesinados por sus propios compañeros.

1497 Juan Cabot descubre Terranova. Pedro Álvarez Cabral descubre Brasil. 1500 1502 Llegan a América los primeros esclavos negros. Diego de Velázquez ocupa la isla de Cuba. 1511
1513 Juan Ponce de León explora Florida. Fundación de
Santiago de Cuba.
1514 1516 Juan Díaz de Solís explora el Río de La Plata. Juan de Grijalva llega a las costas de Yucatán. 1518
1519 Fundación de Panamá. 1519-1521 Cortés conquista el imperio azteca. Conquista de Guatemala
y El Salvador.
1524-1526
1524 Establecimiento del
Consejo de Indias.
Francisco Pizarro y Diego de Almagro exploran el territorio ecuatoriano. 1526
1528 Juan Cabot explora
los ríos Paraná
y Paraguay.
Fray Bernardino de Sahagún llega con una misión franciscana a la Nueva España. 1529 1532 Pizarro conquista
el imperio inca.
Se introduce la caña
de azúcar en Brasil.
1532
1534 Fundación de Quito. 1534-1541 Jacques Cartier explora el río San Lorenzo. Diego de Almagro explora Bolivia y el norte de Chile. 1535-1537 1535 Don Antonio de Mendoza, primer virrey de Nueva España. Se funda la primera Casa de Moneda en México. 1536 Pedro de Mendoza funda el primer establecimiento en Buenos Aires. Exploración de Colombia. Se funda Bogotá. 1538

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