XLV. LA FAMA DE LUCY

EL TRABAJO de los antrop�logos es muy arduo cuando tratan de reunir sus rompecabezas: los restos f�siles de los hom�nidos primitivos de hace millones de a�os. Buena parte del problema es que las piezas que se tienen formaron parte de distintos rompecabezas, esto es, de distintos individuos. El ingenio y el tes�n permiten averiguar buena cantidad de informaci�n s�lo si se logra aclarar primero cu�les f�siles pertenecen a cu�l tipo. Afortunadamente, estas dificultades no se tuvieron con el hallazgo francobrit�nico de un esqueleto, bastante completo, de tres millones de a�os de antig�edad. El descubrimiento fue realizado por Don Johanson y Marcelo Taieb en una regi�n de Etiop�a llamada Hadar, que junto con la regi�n de Kenya explorada por Ricardo Leakey ha sido la mayor fuente de informaci�n sobre nuestro remot�simo pasado.

El esqueleto en cuesti�n, de una hembra muy famosa, hoy llamada Lucy, perteneci� a uno de los tres tipos de hom�nidos que en esa �poca poblaban la regi�n y es de muy baja estatura (alrededor de un metro). Lucy era probablemente prima lejana de nuestros ancestros, otros hom�nidos casi igual de chaparros, pero su familia no tuvo �xito en la vida y desapareci�. Otro tipo identificado, de un hom�nido m�s grandul�n, tampoco pudo sobrevivir. Gracias al descubrimiento del esqueleto de Lucy, preservado bajo 100 metros de sedimentos, hoy entendemos mejor esas historias tan antiguas.