EL CONTROL DE LA POBLACI�N EMPIEZA EN CASA
Poco despu�s de la publicaci�n de la segunda edici�n del Ensayo, Malthus recibi� una oferta que cambiar�a buena parte de su vida. Su primo Richard Dalton (hermano de Jane Dalton, quien vivi� con los Malthus muchos a�os cuando Thomas era m�s joven) le pidi� hacerse cargo de la rector�a de la iglesia de Walesby en el condado de Lincolnshire, al morir el antiguo rector. Esta posici�n significaba un ingreso anual de 300 libras, muy superior al que recib�a por el curato de Okewood. Dado que el nuevo puesto que Thomas acept� requer�a de un administrador, contrat� los servicios de un tal George C. Tennyson, abuelo del famoso poeta Alfred Tennyson.
Para Thomas la limitaci�n econ�mica para contraer matrimonio se hab�a disipado;
ahora pod�a prescindir de la mensualidad que el Colegio de Jes�s de la Universidad
de Cambridge le proporcionaba. Por lo tanto, el reverendo Thomas Robert Malthus,
de 38 a�os de edad, despos� a Harriet Eckersall, de 28 a�os, en la iglesia de
Claverton, en donde �l hab�a asistido por primera vez a la escuela. La ceremonia
matrimonial tuvo lugar el jueves 12 de abril de 1804 a cargo del reverendo Robert
C. Taunton, un amigo (y futuro miembro) de la familia Malthus. Despu�s de la
boda, la nueva pareja se dirigi� en carruaje hacia el norte de Lincolnshire,
para hacerse cargo de la rector�a de Walesby. Por razones que no resultan muy
claras, los Malthus se ausentaban por largos periodos de Walesby y la atenci�n
que Thomas dio a los menesteres de la iglesia fue tambi�n espor�dica. Durante
el tiempo de su rectorado en Walesby solamente ofici� dos bodas; seguramente,
el que un cura con labio leporino oficiara la boda no era de particular atractivo
para las parejas, en especial si la novia ya estaba embarazada... �La superstici�n
hac�a correr a las futuras madres un grave peligro de tener hijos con el mismo
defecto!
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Harriet [Eckersall] Malthus
El primog�nito de los Malthus, Henry, naci� el 16 de diciembre de 1804, ocho meses despu�s del matrimonio; en una carta Thomas comenta el arribo de su hijo como un nacimiento prematuro. El alumbramiento ocurri� en Bath, adonde Harriet quiso viajar un par de meses antes, para estar acompa�ada durante y despu�s del parto por su familia, que viv�a en dicha poblaci�n. Un poco antes de la llegada de su primog�nito, Thomas tuvo que pasar el penoso trance de administrar el �ltimo sacramento a su querido ex tutor, Richard Graves, el 23 de noviembre.
Por esos tiempos, el gobierno brit�nico hab�a decidido la fundaci�n del Colegio [de la Compa��a] de las Indias Orientales (East India College), que ten�a como prop�sito la preparaci�n de los servidores p�blicos para trabajar en las colonias brit�nicas, en especial en la India. El Colegio fue establecido en 1804 en el castillo de Hertford, situado en la poblaci�n de ese nombre y cerca de la actual Haileybury. Al a�o siguiente se empez� a formar el cuerpo docente y, en este proceso, en junio de 1805, Malthus recibi� el ofrecimiento de un puesto permanente como profesor en las asignaturas de historia general, pol�tica, comercio y finanzas. Thomas acept� gustoso el puesto ya que, adem�s de serle mucho m�s atractivo que la rector�a de Walesby, le ofrec�a un sueldo m�s elevado (500 libras anuales, m�s casa y comida). Malthus se mud� de hogar para ir a Hertford con su hijo Henry y Harriet, ya embarazada de su segundo cr�o.
Emily Malthus naci� el 5 de julio de 1806, menos de un a�o despu�s de la llegada de la familia a Hertford, y casi al mismo tiempo que apareciera la tercera edici�n del Ensayo, notablemente ampliada a tres vol�menes. En diciembre del a�o siguiente naci� la �ltima hija de los Malthus, Lucy, simult�neamente con una nueva (la cuarta y ciertamente no la �ltima) edici�n del Ensayo. Thomas cumpli� en su vida personal las ideas que preconizaba en su libro acerca de restringir el tama�o de la familia, lo cual, en una �poca de poca educaci�n acerca de la fisiolog�a humana y de desuso (que no carencia) de medios anticonceptivos, significaba una admirable continencia matrimonial.
La vida familiar de los Malthus en Henford transcurri� en general apaciblemente, con la rutina diaria de los cursos cortada tan s�lo por las espor�dicas rebeliones de los estudiantes del Colegio, cuyas absurdas reglas disciplinarias produjeron varios motines, incluso armados, de los exasperados pupilos.
10 Patricia James, Population Malthus. His Life and Times, Londres, Routledge and Kegan Paul, 1979.
