Las finanzas pasaron por momentos dif�ciles, pues los adeudos contra�dos por gestiones anteriores se acumularon, en tanto que la recaudaci�n fiscal disminuy� "en apariencia". Un a�o cuesta arriba fue 1989, en tanto que los siguientes presentaron cierta recuperaci�n del fisco, que paulatinamente subi� los pagos de predial, luz y agua. Una de la fuentes del d�ficit recurrente fue la desproporcionada participaci�n del estado en recursos distribuidos por la Federaci�n, desproporci�n que se relacion� con el n�mero de habitantes y se manifest� de manera especial en el �rea educativa.
Efectivamente, la educaci�n hab�a correspondido en 50% al estado y otro tanto a la Federaci�n. Mas en la gesti�n de Pichardo ocurri� algo extraordinario: toda la educaci�n b�sica que impart�a el gobierno federal pas� a ser estatal. Se reunieron, pues, los dos subsistemas educativos m�s grandes de todo el pa�s, de tal suerte que el Estado de M�xico lleg� a contar en 1992 con 94 141 maestros de educaci�n b�sica.
En el nivel profesional, simult�neamente a un desarrollo acelerado de las universidades particulares, el estado cre� el Instituto Tecnol�gico de Estudios Superiores de Ecatepec y la Universidad Tecnol�gica de Nezahualc�yotl, establecimientos que ya eran necesarios desde hac�a m�s de 15 a�os. Frente a las metas de una industria competitiva y una agricultura modernizada, la educaci�n eficiente apareci� como una meta a�n m�s importante: "las transformaciones son posibles s�lo en aquellas sociedades en las que la educaci�n se convierte en punta de lanza del cambio y de la movilidad social ascendente".
