Desde Tepic a Guadalajara se desv�an hacia la mano derecha del viajero, el poniente, dos caminos importantes: El segundo, que comienza a unos treinta kil�metros antes de llegar a Guadalajara, rodeando por el norte el bosque de la Primavera, lleva hasta los ca�averales de Tala. De ah� una desviaci�n hacia el norte acaba poco despu�s del antiguo centro minero de Etzatl�n, pero la carretera que se supone principal lleva a Ameca donde comienza a remontarse la Sierra Madre por una v�a que, a pesar de lo agreste, se espera que un d�a llegue a Puerto Vallarta. S�lo que por ahora resulta dificil�simo ir m�s all� de Mascota, en el coraz�n de la sierra, cuya tranquilidad se debe a que no es a�n v�a para ir a otra parte. Sin embargo, adem�s de la explotaci�n forestal, agr�cola y el oro solapado entre Atenguillo y Mixtl�n, justifican plenamente esta carretera los muchos peregrinos que acuden a dar gracias a la virgen de Talpa, sita poco antes de llegar a Mascota.
El primero de los tres caminos cobra vida propia a la altura de la poblaci�n de Chapalilla, Nayarit. Lleva primero a Compostela y desciende luego hacia la costa por una serie interminable de curvas, cuya vera es cada vez m�s verde y frondosa. Este camino tiene como destino principal Puerto Vallarta, antes llamado Las Pe�as, inmediato al r�o Ameca, l�mite de Jalisco con Nayarit desde aguas muy arriba hasta su desembocadura en la llamada bah�a de Banderas. Pero desde mediados de los a�os setenta puede seguirse hacia el sur por la costa m�s bonita —Chamela, El Tecu�n, Tenacatita, Melaque, Barra de Navidad— hasta llegar al r�o Marabasco, donde Cihuatl�n despide al viandante de Jalisco si es que se decide a entrar al estado de Colima. Pero poco antes de llegar a Cihuatl�n es posible tomar un camino directo a Guadalajara, remontando la Sierra Madre, aqu� llamada del Sur, despu�s de cruzar una feraz planicie casi tropical y pasar los f�rtiles valles de Autl�n y Uni�n de Tula, cuyas huertas se nutren con aguas bien aprovechadas del r�o que despu�s se llama Armer�a. De cerros inmediatos a Autl�n se extrajo hasta la d�cada de los setenta una enorme cantidad de manganeso que se export� por el puerto de Manzanillo, y de los promontorios cercanos a Uni�n de Tula puede esperarse cualquier cosa, de lo que dio una buena muestra la plata que anta�o sali� de la vecina Ejutla.
Descender a Cocula, de donde se dice que es el mariachi, aproxima tambi�n a la peque�a laguna de Villa Corona, aprovechada por el turismo nacional y, desde ah�, se alcanza el camino que viene de Morelia entre los ca�averales que rematan en Acatl�n.
