4. La guerra de guerrillas

4. La guerra de guerrillas


Un informe de la �poca nos dice:

En 1811 los realistas controlaban los principales valles, o sea la regi�n que va de Ixtl�n hasta Tepic y de la costa de Compostela a San Blas. La tierra caliente de Acaponeta y Santiago Ixcuintla, as� como la sierra de Nayarit, eran de los insurgentes. Los realistas batallaron todo el a�o de 1811 para someter a los pueblos de la sierra, pero en 1812, otra vez, las guerrillas alborotaban esa zona. En represalia los realistas quemaron La Mesa, Santa Teresa, San Juan Corapan, Ixcat�n, Guamamota, Dolores, el Rosario. De la obra constructiva de los jesuitas no qued� m�s que ruinas humeantes y la gente se dispers�, refugi�ndose en las barrancas o en las alturas m�s apartadas.

De todos modos la llama rebelde segu�a sin apagarse en la sierra y en 1815 bajaron unos serranos a dar un golpe audaz en Tonalisco, a unos kil�metros de Tepic. Eso no amenazaba seriamente el orden; y despu�s de 1812, fuera de la sierra, los realistas no tuvieron problemas. La campa�a en la sierra dur� hasta el a�o 1818, casi sin provecho, porque el terreno favorec�a a los guerrilleros, quienes asolaron ranchos, haciendas y caminos. La Independencia se consigui� en 1821 gracias a la uni�n de los criollos hasta entonces realistas, representados por el militar Iturbide, y de los insurgentes, representados por el indomable Vicente Guerrero. Los dos bandos eran mexicanos, y patriotas cada uno a su modo, pero se necesitaron 11 a�os, un sinf�n de sufrimientos y multitud de vidas sacrificadas, para conseguir la Independencia y poner fin a lo que hab�a sido una tremenda guerra civil.


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