La actividad ganadera ha logrado un desarrollo importante, pero dista mucho de corresponder a lo que podr�a ser. Nayarit ofrece condiciones muy favorables, ya que dispone de amplios pastos naturales en cerros y llanuras (46% de la superficie total) y no padece sequ�as. Una buena parte de esta superficie, sin embargo, se localiza en la sierra y esa mitad no se puede aprovechar bien.
De todos modos, los ganaderos tienen que comprar grandes cantidades de forrajes en Jalisco y Sinaloa para complementar la alimentaci�n de los animales. Otros problemas son las invasiones frecuentes a la propiedad (si se mejora un terreno ganadero, cultivando pasto o alfalfa, los campesinos piden su afectaci�n como terreno agr�cola).
La carencia de asistencia t�cnica, la falta de veterinarios y las enfermedades explican que el ganado sea de baja calidad y que se practique el sistema extensivo, casi n�mada: el ganado anda suelto, batallando para conseguir su alimentaci�n.
Por todas estas razones, el desarrollo de la ganader�a no corresponde al potencial natural. En 1980, 450 000 vacas eran propiedad de 24 000 ganaderos: 50% de ganado corriente, 40% cruzado y 10% fino. La mayor�a de los ganaderos son peque�os empresarios y trabajan con poca tierra. Venden sus animales en condiciones desventajosas. Los compradores van al rancho y no toman en cuenta el peso y la calidad del ganado.
"Generalmente el ganadero desconoce las condiciones del mercado para sus animales. Es obstinado y orgulloso de sus animales, al grado de que com�nmente deja pasar la mejor �poca para la venta del ganado octubre y noviembre, que es cuando est� m�s gordo, despu�s de las aguas, pues constituye un motivo de orgullo poseer muchas cabezas." No le gusta vender su ganado, pues.
Lo malo para todos es que la ganader�a lechera ha permanecido estancada. �En 1974 no hab�a m�s que 5 500 vacas lecheras!, que dieron 34 000 litros al d�a; o sea, seis litros por animal, lo que es muy poco. El resultado es que Nayarit tiene que comprar leche de La Laguna, Aguascalientes y Jalisco. Compostela, Jala, Ixtl�n y Tepic son los municipios lecheros. Existen planes para acabar con el d�ficit lechero, pero lo dif�cil ser� realizarlos.