Es importante advertir que en el art�culo 50 del Plan de Monterrey, hab�a tendencias separatistas. El gobierno local invitaba a los estados de Coahuila y Tamaulipas a adherirse a la campa�a contra el despotismo, pero agregaba
si lo creyeran conveniente, concurran a formar en un solo gobierno un todo compacto y respetable al extranjero, a la guerra contra los b�rbaros y a todo el que pretenda combatir los principios salvadores y de libertad contenidos en los art�culos anteriores.
No era Vidaurri el �nico acusado de separatista, desde 1847 el gobernador de Tamaulipas Francisco Vital Fern�ndez hab�a sido se�alado tambi�n como promotor de una Rep�blica de la Sierra Madre. Se hab�a dicho de �l que desde antes de la guerra contra los Estados Unidos hab�a tenido intenciones de establecerla, siguiendo los proyectos de Marks, c�nsul de los Estados Unidos en Matamoros. Hab�a tambi�n el antecedente de los intentos de la formaci�n de la Rep�blica del R�o Grande, en 1851.
A Vidaurri se le atribu�a conexi�n con los yankees, particularmente con los texanos. Se le acusaba tambi�n de ver con buenos ojos las actividades de quienes en San Antonio incitaban a los fronterizos a separarse de M�xico. Nunca se le comprob� esta actitud que merece estudio m�s profundo.