El 25 de junio de 1914 Venustiano Carranza visit� Monterrey. Aunque se hosped�
en casa del licenciado Eugenio Castill�n, casi todos los d�as de su estancia
en la ciudad los pas� en el Mirador, en la bella finca del general Bernardo
Reyes, sobre la Loma Larga. All� formul� planes y cambi� impresiones con el
gobernador Villarreal, con Alberto J. Pani, Jos� Vasconcelos, Luis Cabrera y
otros. El c�nsul de los Estados Unidos pidi� a Carranza garant�as para los miembros
del clero expulsados. Fue designado Luis Cabrera como mediador para suavizar
esta tensi�n, pero nada se consigui�. Villarreal se mostr� intransigente, alegando
la intervenci�n de aquellos contra la Revoluci�n. Cabrera escribi� por ese tiempo
un op�sculo justificativo para la pol�tica de Villarreal. No todo fue antirreligioso.
Entre las disposiciones de orden social, dict� el gobernador algunas que favorecieron
a los obreros:
Todav�a quedan resabios coloniales y restos de tiran�a
feudal: a�n existen peones y sirvientes que de generaci�n en generaci�n
vienen soportando el peso de las cuentas inacabables, debidas a los amos.
En consecuencia DECRETO
: Queda estrictamente prohibido exigir
trabajos personales en compensaci�n de deudas. Monterrey, 7 de mayo de
1914.
Conviene hacer notar que la moneda circulante en la Revoluci�n ten�a validez o no, de acuerdo con la ocupaci�n de los lugares por uno u otro bandos. Unas veces era aceptado el papel moneda emitido por los villistas en Chihuahua; otras veces los billetes carrancistas emitidos en Monterrey en 1914.
Los hubo de diversas denominaciones y popularmente fueron llamados bilimbiques. Mucha gente se qued� con cantidades que s�lo les sirvieron despu�s para tapizar interiores de ba�les viejos.