Para quienes necesitaban trabajo o buscaban la oportunidad de cruzar el Bravo, era Monterrey la tierra de promisi�n. Mientras consegu�an uno u otro prop�sito, carec�an de lo m�s necesario. En las d�cadas de 1960 y 1970 el despojo de terrenos en forma colectiva o el de invasiones de predios se hizo com�n. El problema de la vivienda se acentu�. Surgieron Promotora de la Vivienda de Nuevo Le�n (Provileon) y Fomento Metropolitano de Monterrey (Fomerrey), instituciones oficiales que se dedicaron a formular programas y a brindar apoyo a millares de familias proletarias.
Por encima de la carencia de vivienda se agudiz� el problema de la escasez del agua. Los Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, atendidos por una compa��a extranjera desde 1904, pasaron en 1945 a manos del gobierno local durante la administraci�n de Arturo B. de la Garza. Las obras en la Huasteca y en la Cola de Caballo; la potabilizaci�n del agua de la presa de la Boca; las perforaciones en San Jer�nimo y los pozos profundos de Mina, desde los a�os cincuenta, fueron cada vez m�s insuficientes. Hubo entonces necesidad de buscar el agua a mayores distancias. El gobierno de Mart�nez Dom�nguez emprendi� y concluy� la presa de Cerro Prieto, en Linares, con capacidad para 400 millones de metros c�bicos, y un acueducto de 133 kil�metros.
Estas obras no fueron suficientes. Continuando el Plan Hidr�ulico, el gobernador Jorge Trevi�o inici� la construcci�n de la enorme presa del Cuchillo, sobre el r�o de San Juan en el municipio de China, con capacidad para 1 000 millones de metros c�bicos, y la de un acueducto de 102 kil�metros. Esta obra ha sido concluida (1994) por el gobierno de S�crates Rizzo Garc�a, y abastecer� no s�lo a Monterrey sino a los municipios del trayecto. El resto de las municipalidades del estado cuentan ya con este servicio.