Los 32 a�os que median entre la independencia y la ca�da del grupo De la Vega fueron de cambios profundos en la sociedad del noroeste y de Sinaloa en particular, por lo que es conveniente cerrar este cap�tulo con algunas reflexiones sobre los sucesos que m�s influyeron en nuestra sociedad.
Al desaparecer el gobierno colonial, se produjo un vac�o de poder que los gobiernos nacionales no pudieron colmar y que aprovecharon los notables para entrar en la vida pol�tica local y tomar las riendas de su propia sociedad. La legalizaci�n y la consolidaci�n del comercio con los extranjeros que llegaron por mar tambi�n tuvo mucha importancia, porque sujet� la econom�a sinaloense al viejo esquema colonial de exportar plata e importar manufacturas y porque estos comerciantes impusieron el dominio de su poder econ�mico. Estos dos sucesos, la independencia de Espa�a y la dependencia de los comerciantes extranjeros, se originaron en el exterior de Sinaloa y del noroeste, pero los notables los aceptaron porque fueron propicios para engrandecer sus fortunas.
El hecho hist�rico interno de mayor trascendencia para la sociedad sinaloense fue la destrucci�n de las comunidades ind�genas. Este proceso ven�a de tiempo atr�s, pero en este periodo se acentu� y produjo cambios en la organizaci�n social de los sinaloenses. Los ind�genas perdieron sus tierras, sus comunidades, su cultura y su identidad �tnica, y se convirtieron en meros peones o medieros al servicio de los nuevos due�os de la tierra y del agua. Los blancos y los mestizos que adquirieron las tierras pasaron a ser terratenientes, hacendados o rancheros, los nuevos rectores de la agricultura sinaloense. Y para mediados del siglo, tan s�lo los mayos del partido de El Fuerte continuaban luchando por defender su patrimonio ancestral.
Este periodo de 32 a�os fue de aislamiento de Sinaloa respecto del centro del pa�s, si lo comparamos con la �poca colonial, cuando el gobierno de M�xico tuvo mayor injerencia en esta regi�n. Y tambi�n fue una etapa de alejamiento entre las distintas provincias del noroeste. Los notables del estado interno de Occidente resultaron incapaces de conciliar sus intereses y prefirieron la divisi�n del estado para paliar las fuertes tensiones entre ellos; sin embargo, no fue la soluci�n al problema porque los notables de Sinaloa siguieron disputando hasta que todos cayeron bajo la f�rula de los comerciantes extranjeros de Mazatl�n. Es muy interesante observar que, durante la guerra contra los Estados Unidos, la flota invasora atac� y venci� sucesivamente a la Alta California, la Baja California, Mazatl�n y Guaymas, sin que los mexicanos se prestaran auxilio. El caso extremo fue el de Sinaloa, pues siendo inminente la invasi�n de los marines, las fuerzas armadas del estado y de la federaci�n combat�an entre s� para dirimir los problemas comerciales entre los notables de Culiac�n y los extranjeros de Mazatl�n.
La mutilaci�n del noroeste, al perder la Alta California, fue tambi�n un hecho trascendental para la historia de Sinaloa porque modific� sus relaciones con los Estados Unidos, y aunque este cambio se manifestara varias d�cadas despu�s no debemos perder de vista que los acontecimientos que repasamos en este apartado conformaron a la sociedad sinaloense, porque su influjo continu� en periodos posteriores, como lo veremos en el siguiente cap�tulo.
