Ju�rez no tiene candidatos predilectos

M�xico, julio 13 de 1868

Se�or general don Ignacio R. Alatorre

Zacapoaxtla

Estimado amigo:

He recibido la apreciable de usted fecha 10 del que cursa y celebro que haya continuado hasta ese punto sin haber encontrado en su marcha dificultades de ning�n g�nero.

Ya se han dado instrucciones al gobernador de Veracruz acerca del uso que pueda hacer de la fuerza del estado, para favorecer las operaciones emprendidas por usted, y hoy mismo escribo al se�or Garc�a repiti�ndole sus indicaciones a fin de que proceda a organizar la fuerza auxiliar que debe ayudar en la campa�a los movimientos acordados por usted.

No es extra�o y es hasta natural que haya encontrado por ese rumbo la opini�n desfavorable respecto del se�or Garc�a a que se refiere, pues precisamente la elecci�n de �ste es lo que ha servido de pretexto a los descontentos para promover el esc�ndalo que amotin� la expedici�n encomendada a usted para restablecer la tranquilidad.

Para el gobierno no hay ni puede haber candidatos predilectos, como no hay entidades antip�ticas habl�ndose de elecciones en que expresan los pueblos libremente su voluntad. Por eso sea quien fuere el elegido, cuando ya la Legislatura ha hecho la declaraci�n, nada podemos ni debemos hacer, sino cuidar de que se conserve el orden, porque estamos obligados a velar sin descanso por los intereses sagrados de la sociedad.

He visto con pena en la carta que dirige usted al se�or general Mej�a, que sigue usted enfermo y, aunque tendr�a mucho gusto en que continuase usted hasta terminar satisfactoriamente la misi�n que se ha confiado, si cree usted que pueden agravarse sus dolencias con motivo de la estaci�n, d�galo as�, oficialmente, para acordar lo que convenga a fin de que pueda usted alcanzar cuanto antes su curaci�n.

Por ac� seguimos bien; ya ocupan los puntos m�s imperantes de la sierra el general Mart�nez y las fuerzas del general Escobedo y �ste me anuncia en su �ltima carta que quedar� asegurada pronto la tranquilidad por aquel rumbo.

Quedo de usted, como siempre, amigo afect�simo y atento seguro servidor q. b. s. m.

(Benito Ju�rez)

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