Durante cincuenta años (1596-1646) existió sólo una, la de Monterrey. En documentos de este tiempo aparecen mencionadas dos más: la del Real de los Apóstoles (probablemente el mineral de San Pedro y San Pablo, al sur de la ciudad) y la de San Juan Bautista, en 1609, en donde más tarde fue fundada Cadereyta; pero ni una ni otra prevalecieron.
La alcaldía mayor de Monterrey, como las demás, se hallaba subdividida en valles. Éstos se multiplicaron y desaparecieron a través del tiempo. Otros fueron separándose de la ciudad, al ser elevados a alcaldías mayores, aun que no dejaron de ser valles. El gobernador, conde de Penalva, dio esa categoría, en 1730, a Santa Catarina, Pesquería Grande (García) y Santiago del Guajuco o Huajuco.
Comprendía Monterrey otros lugares que ya en el siglo XIX habrían de convertirse en municipios, como el Topo de los Ayala (General Escobedo), la Estancia de Pedro de la Garza, o de San Nicolás de los Garza; la de San Francisco (Apodaca), la del Espíritu Santo de la Pesquería Chica (Pesquería) y la de San Pedro de los Nogales (Garza García).
Guadalupe se consideraba comprendido en la ciudad, pero por ser pueblo de indios tenía un gobernador, un alcalde y dos o más regidores indígenas, como ya se explicó al hablar de las misiones y pueblos.
Monterrey había tenido la primera desmembración al ser creada la alcaldía mayor de las Salinas (Salinas Victoria). El gobernador Martín de Zavala la estableció el 1 de octubre de 1646 y designó como primer alcalde mayor a Francisco Báez de Benavides. En el siglo XVIII se llamó Nuestra Señora de Guadalupe y tuvo bajo su jurisdicción a muchas haciendas que después de la independencia serían municipalidades, como la de San Francisco de las Cañas (Mina), la de Chipinque (el Carmen), la de En Medio o el Pueblito (Hidalgo) y la de Nuestra Señora de Guía o Eguía (Abasolo). Comprendió también el valle del Carrizal, en el cual estaban las haciendas de Ciénega de Flores e Higueras (que conservan su nombre), la de Santa Elena (General Zuazua) y la de San Antonio de los Martínez (Marín). En 1826, la de las Salinas fue incluida con el nombre de Salinas Victoria entre las municipalidades de Nuevo León, en honor del primer presidente de México, Guadalupe Victoria.
