Hacia el norte de Nuevo León, la alcaldía mayor más antigua fue la de Almadén (Monclova) desde su primera población en 1577. La jurisdicción de esta zona estuvo siempre en disputa con la Nueva Vizcaya. En 1643, en el periodo más critico de pleito llegó a haber dos alcaldes mayores, uno por aquella provincia: Mateo de Arredondo, y otro por Nuevo León: Diego de Villarreal. La situación quedó indecisa por largos años, hasta la formación de la provincia de San Francisco de Coahuila, cuyo primer gobernador fue el general Alonso de León, a partir de 1687.
Hubo por esa región otra alcaldía mayor, la del real de minas de la Caldera, descubrimiento minero. El 30 de octubre de 1645 fue nombrado alcalde mayor el capitán Diego de Villarreal. La población no perduró. Años después fue fundada a inmediaciones de ese lugar la misión de Candela.
Otra de las alcaldías más importantes, hacia el norte, fue la del real de San Pedro de Boca de Leones, establecida en 1688. A esa alcaldía estuvo agregado el real de Santiago de las Sabinas, hasta que fue elevado a alcaldía mayor hacia 1701. Económicamente ha sido Sabinas una de las poblaciones de mayor relieve. En su pequeño templo de San José, construido al iniciarse la segunda mitad del siglo XVIII, conserva un bello retablo dorado. El 26 de marzo de 1829 le fue dado el título de villa y por decreto de 8 de mayo de 1971, el de ciudad.
Ya dijimos que habiendo entrado en decadencia la misión de Lampazos, fue fundada a sus inmediaciones la villa de San Juan Bautista de Horcasitas de la punta de los Lampazos, en 1752. En ese año quedó construida allí otra alcaldía mayor cuyo primer titular fue el general Bernardo de Posada. Su jurisdicción trasponía el río Bravo hacia el norte. Posada hizo dos jornadas a fin de buscar lugares para asentar nuevas poblaciones.
Al ser descubiertos los notables centros mineros de San Antonio de la Iguala y San Carlos del Vallecillo, quedaron establecidas dos nuevas alcaldías mayores, la primera en 1761, la otra cuatro años más tarde. En 1773, al empezar la decadencia de la Iguana, ésta y la de Sabinas fueron unidas a la de Vallecillo, formando una sola. El primer alcalde mayor de las tres reunidas fu don Bernardo Manuel de Umarán. Sabinas volvió a ser alcaldía por sí sola en la década de 1780.
